Llegaron con el pelo pinta’o y alborota’o a la Casa Olímpica del Viejo San Juan. Y en ocasiones se movieron por los viejos pasillos de la tradicional instalación deslizándose sobre sus patinetas. Llegaron con otro flow, uno distinto al olimpismo tradicional.

Los skaters olímpicos boricuas Manny Santiago y Steven Piñeiro agregaron esta semana otro sabor a la delegación de Puerto Rico desde su primer encuentro personal con los otros atletas de Puerto Rico que representarán la Isla en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.

“Fue genial, contentos y compartieron hasta el final”, dijo la directora de prensa del Comité Olímpico de Puerto Rico, Tere Miranda, sobre la dinámica de los skaters con sus pares olímpicos.

La “demografía” de las delegaciones de Puerto Rico sufre cambios por periodos. Por ejemplo, la delegación vivió en la década del 50 la entrada de la atleta mujer al ruedo olímpico. Esa integración le dio, no solamente color a la delegación que entonces estaba en blanco y negro, sino que le dio nuevas oportunidades de medallas encabezadas por la primera presea dorada boricua a nivel olímpico conseguida, precisamente, por Mónica Puig.

Ahora la delegación vive otro cambio con la entrada de deportes no tradicionales impulsados por el Comité Olímpico Internacional, como es el caso de la patineta, que introduce en la delegación atletas con una formación deportiva callejera, con una personalidad sin miedo forjada por disciplinas extremas, pero con la misma intención de ganar que el resto de los atletas.

“La vida de nosotros es distinta al boxeo, al béisbol, a pista y campo. Nos criamos en la calle corriendo skate”, dijo Santiago. “Pero el skate también tiene pasión, tiene sueños. Eso lo compartimos con los otros atletas”.

El skater parece ser un atleta sin temor al fracaso. La naturaleza de su deporte coloca al atleta en posición de levantarse de las comunes caídas para lograr el objetivo. El riesgo es parte de su juego.

Steven Piñeiro vuela al filo de la pared. Competirá en la modalidad de Park.
Steven Piñeiro vuela al filo de la pared. Competirá en la modalidad de Park. (Ramón "Tonito" Zayas)

Su personalidad es relajada, tal vez por pasar tanto tiempo libre sobre la patineta, muchas veces sin supervisión de coaches, contrario a la gran mayoría de los deportes.

El skater considera la patineta un arte, además de un deporte. Por eso los tatuajes, la melladura y el pelo pintado de Santiago, o la admisión de Pineiro en la escuela de arte culinarias de la Universidad Ana G. Méndez.

Para Manny Santiago la patineta es un arte, además de un deporte.
Para Manny Santiago la patineta es un arte, además de un deporte. (Ramón "Tonito" Zayas)

El activo saltador Luis Joel Castro es de los atletas más extrovertidos que han tenido recientes delegaciones de Puerto Rico. Castro está cerca también de clasificar a los Juegos de Tokio y desfilar junto a Piñeiro y Santiago que, si los dejan, hacen el desfile sobre sus patinetas.

Castro entiende que la llegada de los skaters es saludable para la delegación.

“Lo veo bien transparente. Lo que veo es otro boricua más representando la Isla. Veo una familia más grande. Me encanta ver cómo va creciendo la familia con los cambios con deportes nuevos o talentos nuevos que se clasifiquen. Lo veo como otro hermano que se une a la familia”, dijo.

La patineta apela a la juventud. El propósito del movimiento olímpico al introducir en Tokio deportes como el skate, el surfing y el BMX es atraer la energía de la juventud que practica o se identifica con esos deportes y sus culturas.

En Puerto Rico, Santiago y Piñeiro ya entraron con el pie derecho en la juventud de la delegación.

Santiago y Piñeiro ya tienen una fanática especial en la atleta más joven de la delegación, la tenimesista Adriana Díaz, de 20 años. Díaz dijo que ha escuchado que el ambiente de las competencias de skate es bueno y ve a Santiago y a Piñeiro como unos atletas que hacen cosas “super cool”.

“Me encanta. Le dije a Melanie (Díaz) ’ellos parecen super cool. Lo que hacen es como nosotros: un deporte no regular. Y los he visto y me encantaría ir a una competencia de ellos y verlos en acción. Están super duros en lo que hacen. Me encanta que vayan con nosotros. Todavía no nos conocemos muy bien, pero en un futuro espero que sí“, dijo.