Ginebra. El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI) hizo todo lo posible por mantenerse neutral el miércoles cuando Canadá, Gran Bretaña y Australia siguieron los pasos de Estados Unidos al anunciar boicots diplomáticos a los Juegos de Invierno de Pekín.

Thomas Bach, quien ha dirigido al organismo en medio de problemas desde que asumió el cargo en 2013, trató de convertir el desaire diplomático en positivo al señalar que cada país está permitiendo que sus atletas y equipos compitan en Pekín.

“Tenemos todo nuestro enfoque en los atletas”, dijo Bach en una conferencia de prensa en línea. “Damos la bienvenida a que puedan participar, que cuenten con el apoyo de sus gobiernos nacionales. El resto es política”.

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Bach también se autoelogió por sus videollamadas con la tenista Peng Shuai, un exatleta olímpica de China que ha desaparecido de la vida pública desde que acusó a un ex alto funcionario del Partido Comunista de agredirla sexualmente.

Los Juegos de Pekín están programados para abrirse el 4 de febrero, y serán los segundos Juegos Olímpicos que se celebran durante la pandemia de coronavirus. Los Juegos Olímpicos de Verano en Tokio se llevaron a cabo entre julio y agosto, un año más tarde de lo planificado originalmente.

Los aliados occidentales que han anunciado boicots diplomáticos actúan contra China debido a preocupaciones de mucho tiempo sobre el historial de derechos humanos de ese país, incluido el trato del pueblo uigur, de minoría musulmana. Muchos lo han llamado genocidio.

Bach, quien se vio personalmente afectado por el boicot total liderado por Estados Unidos para los Juegos Olímpicos de Moscú de 1980, cuatro años después de ganar una medalla de oro en esgrima por equipos con Alemania Occidental, descartó la posibilidad de que más desaires diplomáticos dañen los próximos Juegos de Invierno.

Los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín están programados para celebrarse a partir del 4 de febrero.
Los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín están programados para celebrarse a partir del 4 de febrero. (Archivo / AP)

“Escucharán el mismo comentario de nosotros por cada decisión política de cualquier gobierno”, dijo Bach. “La integridad de los juegos tiene que ver con la integridad de las competencias deportivas”.

Sin embargo, la situación que rodea a Peng ha generado sospechas de que el COI podría estar en confabulación con China. Los únicos contactos internacionales que ha hecho Peng han sido con funcionarios del COI, incluido Bach en una videollamada de 30 minutos, mientras que las jugadoras y autoridades del tenis femenino han sido excluidas.

“Las sospechas se pueden tener siempre y sobre todo”, dijo Bach, quien ha tenido varias reuniones y llamadas con el líder chino, Xi Jinping, desde que Pekín fue elegida como sede en 2015.

“El derecho humano más importante es la integridad física”, dijo Bach sobre la seguridad de Peng, “y es esa integridad física la que hemos estado garantizando durante estas llamadas, continuaremos las llamadas y continuaremos el apoyo”.

El COI no ha proporcionado imágenes de video o transcripciones de las llamadas, lo que alimenta las dudas de que Peng pueda hablar o viajar libremente. También apareció brevemente en un evento de tenis infantil en Pekín.

A pesar de esas llamadas, la Women’s Tennis Association (WTA) dijo la semana pasada que retirará sus torneos de China debido a la preocupación por la seguridad de Peng.

Bach, quien se reunirá con Peng para cenar en Pekín en enero, insistió en que la estrategia del COI de “diplomacia silenciosa” había logrado hasta ahora “lo que razonablemente se podía esperar que logremos”.

Bach también dijo que estaba abierto a la posibilidad de que una figura de confianza del tenis, como Martina Navratilova, se uniera a una llamada con Peng. Pero dijo que era Peng quien debía decidir quién estaba en la llamada.

“¿Por qué no respetan a Peng Shuai en esto”, dijo Bach, “y la dejan decidir cuales son sus prioridades?”