Buenos Aires — El astro Lionel Messi llegó el miércoles a la Argentina y quedó confinado en el predio de selecciones bajo estrictas medidas sanitarias mientras dure la participación de los albicelestes en la Copa América.

Messi, quien todavía no anunció qué será de su futuro tras vencer el contrato que lo une con Barcelona hasta el 30 de junio, viajó en su avión privado junto a su familia y el volante Rodrigo De Paul, del Udinese de Italia, otro de los citados por el técnico Lionel Scaloni para la doble fecha de eliminatorias al mundial de Catar 2022 y el certamen continental.

También el miércoles se sumaron a la concentración de Argentina en la localidad de Ezeiza, al oeste de la capital, Nicolás Tagliafico (Ajax, Holanda), Alejandro Gómez (Sevilla, España) y Lucas Martínez Quarta (Fiorentina, Italia).

Allí ya están trabajando desde hace unos días Lucas Alario y Exequiel Palacios (Bayer Leverkusen, Alemania), Nicolás González (Stuttgart, Alemania), Lautaro Martínez (Inter, Italia), Nicolás Domínguez (Bologna, Italia), Ángel Di María y Leandro Paredes (PSG, Francia).

El capitán Messi quedó confinado junto a sus compañeros en el complejo de entrenamiento de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), el cual sólo abandonarán para jugar los compromisos previstos el 3 y 8 de junio contra Chile y Colombia por las eliminatorias y luego entre el 13 de junio y el 10 de julio por la Copa América.

Mientras tanto no podrán salir de allí ni recibir visitas de personas ajenas a la burbuja de unas 90 personas, entre jugadores, cuerpo técnico, asistentes y personal administrativo.

De acuerdo con el estricto protocolo diseñado por el cuerpo médico del seleccionado, los jugadores dormirán en habitaciones individuales. Al quedar colmada la capacidad del complejo, se contrataron 17 casas rodantes utilizadas en las carreras de automovilismo para alojar a Scaloni y a sus ayudantes.

También se instalaron carpas gigantes que funcionarán como gimnasio, comedor, centro de hisopados y recreación para evitar aglomeraciones en espacios cerrados. Además, el uso de vestuarios no estará permitido y cada jugador deberá cambiarse en su habitación.

A medida que van llegando al predio, los futbolistas permanecen aislados hasta conocer el resultado de pruebas PCR. Las misas se repetirán por lo menos durante tres días.

Los recaudos buscar reducir el riesgo de contagios en momentos en que Argentina bate su propio récord de enfermos y muertos por la segunda ola de coronavirus. Hasta el momento suma 3.5 millones de casos confirmados y más de 75,000 muertos.

El plantel argentino se completará en los próximos días con Franco Armani, Gonzalo Montiel y Julian Álvarez (River Plate); Juan Foyth (Villarreal, de España) y Sergio Agüero (Manchester City, Inglaterra), estos dos últimos involucrados en la final de la Liga de Europa y de la Liga de Campeones, respectivamente.