Las bandas de lluvias sobre la región de Puerto Rico no detuvieron la acción de la cuarta edición del Puerto Rico Beach Tennis Extravaganza que comenzó al miércoles y culmina el domingo.

Los partidos se llevaron a cabo según planificado a pesar de los inconvenientes que provoca la arena mojada y que dificultan los desplazamientos dentro de las canchas.

“La lluvia pone la bola un poco más pesada. Si llueve demasiado la malla baja de altura. Puede molestar un poco en los ojos también, pero lo que es igual no es ventaja”, explicó Javier Méndez Colón, de San Juan.

“Lo bueno del beach tennis es que puede llover y como quiera se puede jugar. Una vez escampa, no hay que secar la cancha como en otros deportes. Enseguida que deja de llover se puede seguir jugando”, insistió.

En las 16 canchas que fueron habilitadas para el certamen hubo acción el jueves con las participaciones de los profesionales, incluyendo la pareja que ocupa el primer lugar en las clasificaciones mundiales la International Tennis Federation (ITF), en la modalidad de playa, el español Antonio Miguel Ramos y el italiano Michele Cappelletti.

“La lluvia molesta un poco en nuestros juegos. Afecta porque la bola se pone más pesada, el golpe es irregular, la raqueta se puede resbalar de la mano y complica un poco el juego en la cancha. Pero es lo mismo para los cuatro en la cancha, así que uno tiene que ajustarse. No se puede quejar mucho”, sostuvo Juliano Rodríguez, compañero de equipo de Méndez.

Las jornadas del Puerto Rico Beach Tennis Extravaganza en la playa que colinda con La Concha Rennaissance Hotel comienzan a las 8:30 a.m. y continuarán hasta las 9:30 p.m. El público interesado en disfrutar de los desafíos puede hacerlo libre costo, incluyendo los juegos en la cancha central.