Hombres participarán por primera vez en nado sincronizado olímpico
Los hombres han participado en la natación artística a niveles inferiores por décadas. Ahora estarán en los próximos Juegos Olímpicos en París.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 1 año.
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Bill May y otros deportistas de nado sincronizado — ahora conocido como natación artística — han escuchado todos los insultos.
Pero ahora tienen la última palabra.
Los hombres han participado en la natación artística a niveles inferiores por décadas. Ahora estarán en los próximos Juegos Olímpicos en París.
“Creo que es una gran oportunidad para el deporte para crecer y atraer más hombres”, dijo May a The Associated Press durante el Campeonato Mundial de Natación. “Al dejar fuera a los hombres, limitas el deporte”.
May tiene el físico de un fisicoculturista y fue uno de los primeros en participar en el primer Mundial en 2015, luego de 17 años en el Cirque du Soleil. Ahora regresa del retiro competitivo para participar en unos Juegos Olímpicos.
“Siempre ha existido la idea errónea de que es un deporte de mujeres o que no es difícil”, indicó May, de 44 años. “Todos los que tienen algo negativo que decir, inténtelo y sabrán que es el deporte más difícil del mundo”.
En especial el evento acrobático por equipos cuenta con rutinas de levantamientos, giros e inmersiones, saltos sobre los hombros de sus compañeros. Es gimnasia en agua y existe riesgo de conmociones.
Los hombres interesados en el deporte usualmente tienen que lidiar con los estereotipos.
Desde que estaba en primaria, el estadounidense Kenny Gaudet, de 18 años, soñaba con practicar natación artística. Lo logró, pero no fue fácil.
“Me emociona pensando en los problemas por los que pasamos y las batallas que superamos para poder nadar y hacer lo que amamos”, aseguró Gaudet, quien participó en el Mundial de este año.
Algunos países cuentan con participantes masculinos en el campeonato mundial, incluyendo a Estados Unidos, Japón, Alemania y China. España e Italia son los favoritos.
Otro miedo sin fundamento es que las mujeres podrían resentir que hombres participen.
Al preguntarle sobre el supuesto resentimiento, la estadounidense Anita Álvarez respondió: “Para nada”.
Los hombres pueden añadir algo de fuerza física a las rutinas y su presencia podría llevar a una mayor audiencia.