El tenista estadounidense Frances Tiafoe sacó unas horas este domingo en la mañana para practicar horas antes su partido amistoso de esta noche con el español Carlos Alcaraz en el Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot.

La cita fue ante un reducido grupo de personas que tuvo acceso al llamado “Choliseo”; unos para ver el entrenamiento, mientras otros estaban en la cancha con el número 18 del mundo de la Asociación de Profesionales del Tenis (ATP, por sus siglas en inglés). El más agraciado de todos fue el joven tenista Nicolás Rubén Álvarez Torres, de 21 años, quien tuvo la oportunidad única de foguear con Tiafoe por alrededor de una hora.

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Fue una sesión en la que -al decir de Álvarez Torres- él fue quien más partido sacó del entrenamiento por todo lo que aprendió y por lo desprendido y simpático que se mostró el campeón de los torneos de Delray Beach (2018), Stuttgart (2023) y Houston (2023).

Frances Tiafoe devuelve un ataque durante su sesión de práctica esta mañana con jóvenes boricuas en el Coliseo de Puerto Rico.
Frances Tiafoe devuelve un ataque durante su sesión de práctica esta mañana con jóvenes boricuas en el Coliseo de Puerto Rico. (Ramon "Tonito" Zayas)

“Fue una experiencia increíble. Superagrecido. Todavía no me lo creo. Quisiera comenzar diciendo que Frances es un tremendo ser humano fuera de la cancha. Estuvo conmigo dándome consejos. Yo sentía que el entrenamiento era para mí”, compartió el estudiante de biología de la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras (UPR-RP).

“Él estaba entrenándome a mí, él me estaba dando consejos a mí de cómo jugar, de qué tengo que mejorar. Hicimos muchos patrones, driles, servimos, jugamos puntos al final, o sea, increíble, increíble, de verdad que es una experiencia única. Estoy agradecido”, agregó con la felicidad brontándole por los ojos.

Álvarez Torres, quien recién se ha reincorporado al tenis tras superar un doloroso episodio de un neumotórax espontáneo (colapso pulmonar que ocurre sin una causa conocida o sin lesiones) que lo mantuvo lejos del tenis y le hizo temer que no pudiera volver a practicar ningún deporte, reiteró que jugar ante Tiafoe fue una experiencia única y reconoció la potencia de los tiros del estadounidense.

“Fue superrápido. La velocidad de la bola es otra. Podía aguantar los peloteos con él, pero yo estaba -como podrán ver en los vídeos- casi jugando en la grada. Pero sí, fue una experiencia única, definitivo”, reconfirmó la primera raqueta del equipo de la UPR-RP.

De hecho, Álvarez Torres admitió que era la primera vez que entrenaba con un tenista que esté dentro de los primeros 20 del escalafón de la ATP. En una ocasión anterior lo hizo ante Keegan Smith, cuyo mejor posición ha sido 339. Pero nada se compara con lo que vivió este domingo.

El juego entre Frances Tiafoe y Carlos Alcaraz será hoy domingo en la tarde.
El juego entre Frances Tiafoe y Carlos Alcaraz será hoy domingo en la tarde. (Ramon "Tonito" Zayas)

“Sí han venido algunos otros jugadores, ya sea de vacaciones, o entiendo que se hizo también un torneo futuro en Palmas del Mar y tuve la oportunidad de pegar con alguno de ellos, pero nada comparado a un top 10 del mundo, definitivamente esto fue una experiencia única”, puntualizó el deportista que ha sido parte de las selecciones juveniles que participan del Junior Davis Cup.

Por su parte, Tiafoe -a quien se le observó ofrecerle consejos al juvenil boricua- dijo haber tenido una buena sesión.

“Tuvimos una buena práctica, muchas buenas conversaciones durante el entrenamiento. Es un buen chico, sin duda. Conoce a uno de los chicos de mi equipo, así que estuvo genial. Hubo buena camaradería y creo que entrenamos bien”, expresó “Big Foe”, como es conocido el tenista profesional en una referencia a su apellido y su estatura de 6′2″.

“Pasamos un buen rato. Estuvimos más de una hora, el tiempo vuela cuando te estás divirtiendo. Así que estuvo bien”, reiteró el deportista.

Al hacerle notar que durante el entrenamiento se le vio conversando con Álvarez Torres, manifestó que es algo que suele hacer cada vez que tiene la oportunidad de compartir con jugadores más jóvenes, pues sabe lo que se siente estar en esa posición.

“Sí, cada vez que entreno con la próxima generación, si veo algo, ya sabes, puede que vuelva a entrenar con él o puede que nunca lo vuelva a ver. Así que esa hora significa mucho para él. Yo también fui ese chico en sus zapatos, así que sé lo que se siente. Si puedo darle un par de consejos valiosos, cosas que recordará y que, con suerte, se le queden grabadas, eso es lo que realmente cuenta”, remarcó.