La Selección Femenina de Balonmano ya entró  a su nuevo ciclo olímpico con su participación en el Campeonato del Norte y el Caribe (NORCA) que se está realizando en Río Grande.  

Su norte siempre es cosechar triunfos para Puerto Rico. La meta principal está centrada en conseguir el pase y demostrar su hegemonía en  en la región durante  los Juegos Centroamericanos y del Caribe que se llevarán a cabo en Barranquilla, Colombia, en el 2018.

“Tenemos en la mente los juegos de Barranquilla. En ese proceso tenemos planificado, antes de culminar con nuestro sueño, cambiar los resultados que hemos tenido en los últimos tres ciclos. Este equipo ganó plata en los Juegos Centroamericanos en Veracruz y en Mayagüez. Queremos cambiar eso, queremos oro. Estamos trabajando en eso”, aseguró  Néstor Milete, presidente de la Federación Puertorriqueña de Balonmano, luego  que  Puerto Rico jugará su primer partido ante Estados Unidos.       

El NORCA concede tres puestos al Campeonato Panamericano Adulto Femenino a efectuarse del 15 al 25 de junio en Buenos Aires, Argentina. 

Para la encomienda que se les ha encargado, el equipo ha comenzado un proceso de transformación a un juego más táctico, buscando siempre dar un pase extra que aumente  la efectividad de sus tiros a la portería. 

“Este equipo ha estado jugando junto desde que muchas de las jugadoras tenían 13 años. Es una gran familia. Los resultados que hemos tenido   se han dado porque jugamos con mucho corazón. Ahora buscamos ser más tácticos en nuestro juego. No es algo que se dé de la noche a la mañana. Todavía hay que trabajar más en eso, pero hoy se vieron los primeros resultados”,  manifestó Camilo Estévez, dirigente del sépteto.

Puerto Rico jugó una primera mitad de ensueño ante la representación estadounidense,  ejecutando al dedillo, con tranquilidad, todas las jugadas tácticas que le exigía su cuerpo técnico.  Sin embargo, en la segunda mitad se cayó un poco esa efectividad ante varios ataques laterales y las nuestras cayeron, 28-26.

“En este  nuevo ciclo, que estamos comenzando, hay jugadoras más veteranas. Nos estamos complementando. Estamos en el proceso que las jóvenes se adapten a nuestro juego y nosotras al de ellas. Es un equipo joven que, aunque llevemos mucho tiempo jugando por Puerto Rico, tenemos un promedio de edad de 23 años. Vamos paso a paso”, explicó Nathalys Ceballos, capitana el equipo. 

Lo primero que hay que hacer es   clasificar al Panamericano. Una vez allí,  entrar al medallero y superar el cuarto lugar que obtuvieron  en el 2014.

“La idea es seguir creciendo como equipo. Tener  otra clasificación al Campeonato Mundial”, prosiguió Ceballos.