Toa Baja. La construcción de un espacio para quienes practican las distintas modalidades de patinetas es una de las alternativas sobre la mesa que evalúa el Municipio de Toa Baja para los predios de terreno donde ubica en Levittown el una vez celebrado primer parque de pelota bajo techo de pequeñas ligas en Latino América.

La posibilidad existe como una de las alternativas para la reconstrucción del parque Héctor M. Ralat en Toa Baja que está cerrado desde el 2017 cuando sufrió severos daños al ser azotado por del huracán María.

La estructura fue construida a un costo original de $8 millones bajo la administración del hoy desacreditado exalcalde Aníbal Vega Borges. El estadio se inauguró hace 12 años y allí ce celebraron torneos de la American Congress y la Pee Wee Reese, entre otros. Pero el recinto está hoy en deplorables condiciones afectado duramente por el huracán María y sucesivamente por el salitre que abunda en el área.

El alcalde de Toa Baja, Bernardo “Betito” Márquez García, relató que el deterioro se acrecentó por el largo proceso burocrático para obtener el dinero necesario para realizar las obras de reparación en distintas estructuras debido a unas disputas con la aseguradora Triple S.

Márquez García confirmó que al fín llegó a unos acuerdos satisfactorios, pero que el primer proyecto en turno es reparar una dependencia municipal y, a su vez, la piscina olímpica, antes de mirar hacia los parques de béisbol.

“El proceso con FEMA (Agencia para el Manejo de Emergencias) fue burocrático, pero a nosotros se nos complicó porque teníamos la reclamación al seguro y eso dilató todo el proceso. La oferta inicial fue de $1.5 millones que no aceptamos. Hace un año llegamos a un acuerdo de $10 millones y tranzamos”, compartió.

“Pronto comenzaremos lo que es el centro de gobierno y la piscina, pero hemos pospuesto el parque bajo techo porque deseamos estar seguro de que lo que se haga, sea una reconstrucción que los dineros sean suficientes”, agregó.

Márquez García sostuvo que está abierto a la idea del parque de ‘skate’.

“El parque bajo techo es una reconstrucción que tendría que hacerse con mucho detenimiento porque estamos frente a la playa. El salitre afecta todo lo que tiene acero. Hemos visto el auge que tiene el ‘skateboard’ en Puerto Rico y es algo que estamos mirando. Existe un interés en hacer una pista de ‘skateboard’. Es algo que me interesa. Sería el primer parque de ‘skateboard’ techado en Puerto Rico y el Caribe”, explicó.

Márquez García advirtió que el proyecto podría demorar de dos a tres años en ser completado.