Diego Otero vuelve a correr por una gran causa
El fondista y estudiante recorrerá 200 millas en 10 días alrededor de la Isla por las personas con diversidad funcional.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 2 años.
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A esta hora en que leas -lector- este artículo, el estudiante-atleta de la Universidad de Puerto Rico de Río Piedras, Diego Otero, estará en Isabela, ya finalizado el tercero de 10 días de carreras pedestre ininterrumpidos iniciados en San Juan y en los que aspira a completar 200 millas por las costas de Puerto Rico para levantar fondos a beneficio de los Centro María de los Ángeles.
Tal vez lo vio corriendo el año pasado, cuando Otero realizó la misma gesta con el mismo propósito. O tal vez lo vio en la madrugada corriendo por carretera #2 antes de llegar a Isabela junto a su grupo de apoyo en la causa.
Pero sepa que el fondista no se conformó con una ‘Vuelta con Sentido’, como le llama a su proyecto, sino que le ha dado continuidad al estilo del comediante y animador Raymond Arrieta, que año tras años se pone las tenis para caminar con un propósito similar las vías de Puerto Rico.
Y Diego se puso las tenis nuevamete para seguir ayudando al Centro.
“Si lo hacía una vez nada nunca iba a saber el potencial que tiene. Y lo tratamos otra vez”, dijo Otero.
El Centro María de los Ángeles da servicios a la comunidad con diversidad funcional. El Centro también fue el hogar para el que Otero hizo la “Vuelta con Sentido” en el 2021 y es nuevamente el tema de la gesta que completa el estudiante-atleta que cursa su cuarto año de Biología en el principal centro docente del País.
“Queremos seguir recaudando y concienciando sobre la diversidad funcional. Esperamos sobrepasar lo que logramos el año pasado”, dijo Otero sin dar detalles.
La diversidad funcional es un término que se utiliza para nombrar a los ciudadanos con alguna discapacidad, ya sea física o mental, que les dificulta realizar actividades rutinarias. Necesitan ayuda directa de sus familiares o voluntarios.
Otero contó que no tiene familiares con diversidad funcional, aunque agregó que conoce muchos casos. Y dijo que escogió esa comunidad y que se identificó con ella, porque es su deseo es ayudar al prójimo, aunque sea a un individuo.
“Si podemos impactar a más gente de la que impactamos el año pasado será bueno. Pero si impactamos a una es más que suficiente”, dijo.
El pasado 8 de dicembre, Otero estuvo compitiendo en Cayey en el campeonato de campo traviesa de la Liga Atlética Interuniversitaria. También compitió en las pasadas Justas en abril para los Gallitos de la UPR de Río Piedras.
Seis días luego de correr en Cayey, Otero inició la “Vuelta con Sentido” y los sus 10 días de carreras ininterrumpidas con un trayecto de 18 millas desde Toa Baja a Vega Baja.
“Me fue muy bien ese primer trayecto, mucho mejor de lo esperado. Pensé que iba a estar más resentido, pero estoy listo”, dijo sobre la ruta por la carretera 165 de Toa Baja a Dorado hasta conectarse con la carretera #2 hacia Vega Baja por donde hay muchos “planos falsos”, como le llaman en el fondismo a tramos con cierta elevación.
“Hay que cogerlo con calma para no explotarnos”, dijo.
Ayer volvió a hacer otras 18 millas, pero esta vez de Manatí a Arecibo. El tramo estuvo más caluroso de lo esperado, dijo algo afectado.
Y hoy de madrugada retomó la ruta desde Hatillo hasta Isabela, en donde le coge el día de recuperación y compartir para seguir mañana la gesta.
Al momento, la gesta ha sido enriquecedora.
“El jueves (de Manatí a Arecibo) corrimos con Juan Carlos, uno de los niños del Centro. Fue una experiencia enriquecedora, dicho por él mismo, y tuvimos un apoyo brutal de todo el mundo”, dijo.
El atleta corre acompañado por compañeros de la “iupi” o por ciudadanos que se le unen en la ruta. Tiene un equipo médico y de seguridad de apoyo.
Mañana sábado, la ruta de Otero recorrerá desde Aguadilla a Mayagüez, desde la Casa Alcaldía, por la carretera #2 hasta llegar a campus de la UPR de Mayagüez. Correrá en la madrugada-mañana, como hace en todas las rutas.
Boquerón, La Parguera, Guánica, siguen en la agenda de Otero y su grupo, así como Yauco, Peñuelas, Ponce, en su ruta hacia el regreso a la zona de San Juan, en donde concluirá su trayecto de 200 millas y sobre 30 horas sumadas de esfuerzo quemando brea.
Su llegada triunfal a San Juan está proyectada para el 23 de diciembre, proveniente desde Luquillo y atajando por Loíza, hasta llegar al sector del Último Trolley en el parque Barbosa, frente al residencial Llorens Torres en Santurce para una celebración.
“Soy corredor de 5,000 y 10,000 metros, pero esta idea me nace (por mi intención) de ayudar. Es tremenda idea”, dijo.