Wimbledon. A Chris Eubanks finalmente se le acabaron los aces y la energía en un mágico debut en Wimbledon. Aún así parecía que el estadounidense de 27 años, que cautivó a la afición en el All England Club y en casa se la estaba pasando de lo mejor, pero el juego estable de Daniil Medvedev fue más de lo que pudo.

Disfrutando de los gritos en las gradas en la cancha 1, Eubanks se fue arriba por dos sets a uno ante el campeón del Abierto de Estados Unidos 2021 —y llegó a estar a cuatro puntos de ganar en el cuarto. Pero el desgaste para el tenista que nunca había llegado a esta instancia en un Grand Slam comenzó a ser evidente en ese momento y Medvedev ganó por 6-4, 1-6, 4-6, 7-6 (4), 6-1 para alcanzar su primera semifinal en Wimbledon.

Si Medvedev se mostró algo vacilante, quizá distraído por una discusión con el umpire por una bola que le pegó al operador de cámara, se recuperó bien.

“Hubo un momento en el que sentí que perdí, como decirlo, perdí el juego y él jugó bien. Me comencé a hundir y comencé a cometer muchos errores, sin servir bien”, indicó el tercer sembrado, quien enfrentará a ahora al número uno Carlos Alcaraz en la semifinal del viernes.

El español venció por 7-6 (3), 6-4, 6-4 a Holger Rune (6) en la Cancha Central en el primer duelo en la historia de la era abierta de Wimbledon con dos tenistas que no han cumplido 21 años. Ambos tienen 20 años.

Cuando Alcaraz respondió con un revés para sellar el primer set, puso sus manos sobre su cabeza y gritó. Tomó una pausa y volvió a gritar. Trotó a la banda con la cabeza viendo al cielo y gritó “¡Vamos! ¡Vamos!”