Veracruz. Puerto Rico brilló en la jornada del sábado de clavados en los XXII Juegos Centroamericanos y del Caribe, al sumar dos medallas de bronce en los eventos que celebraron en la piscina del Centro de Leyes de Reforma de esta ciudad. 

Rafael Quintero, en la prueba de 10 metros plataforma, y Luisa Jiménez y Jennifer Fernández, en trampolín tres metros sincronizados, ganaron sendas medallas de bronce para aportar al botín de preseas de la Isla en estos Juegos. 

El primero en subir al podio fue Quintero, de 20 años, quien finalizó tercero en su prueba al sumar puntuación de 468.65 entre sus cinco saltos. Fue la segunda medalla de bronce de Quintero en Veracruz, pues el miércoles también finalizó tercero en trampolín tres metros.

“Uno trata de apuntar a una posición más alta, pero todavía estoy contento con el tercer lugar”, compartió Quintero, quien fue uno de los competidores que más aplausos recibió por parte del público mexicano.

“Es un sentimiento brutal. Me gusta que el público, siendo yo puertorriqueño, y que no se sea de su país, me apoyen. Así me siento que hice el clavado bien”, subrayó el joven.

En esa prueba, la medalla de oro fue para el mexicano Alejandro García (502.70) y la plata para el también azteca José Ruvalcaba (483.35).

Luego, en el segundo turno de la noche, Jiménez y Fernández finalizaron terceras en un complicado grupo que incluía rivales de México, Colombia, Venezuela y Cuba. Las boricuas registraron 250.02 puntos. El oro fue de las mexicanas Arantxa Chávez y Dolores Hernández (304.20), mientras que la plata se la llevó Colombia en las figuras de Diana Pineda y Sara Bedoya (266.16).

Tras bajar del podio, ambas llevaban una sonrisa de oreja a oreja. Jiménez, de 26 años, ya suma dos medallas en estos Juegos desde que comenzó a participar en San Salvador 2002, pero para Fernández, Veracruz 2014 es su primera justa regional.

“La meta era llegar acá fuerte, y es la primera vez que hacemos sincronizados.  Nos fue súper bien”, dijo una emocionada Jiménez.

Antes de Veracruz, ambas pasaron tres meses entrenando en Canadá. Salieron de Puerto Rico el 6 de septiembre, y aún no han regresado a la Isla.

“Queremos mofongo con carne frita, bacaladitos, arroz mamposteao, tostones, ¡queremos todo! Trabajamos bien duro para esto, estamos súper contentas”, exclamó Jiménez entre risas.

Por su parte, Fernández, de 22 años, dijo que la oportunidad de entrenar juntas fuera de la Isla hizo la diferencia. “A nosotras nos ayudó muchísimo, subimos un montón de nivel. La técnica la mejoramos muchísimo. Yo le daría la oportunidad a más atletas, quien sabe, tal vez a lo mejor salen más medallistas”, sentenció Fernández.