El título hall of famer ya acompaña al puertorriqueño Charlie Pasarell dondequiera que vaya.

Pasarell, de 69 años, fue exaltado el pasado sábado al Salón de la Fama del Tenis Internacional en Newport, Rhode Island, lo que lo convirtió en el segundo puertorriqueño en conseguir su espacio entre los inmortales de dicho deporte. Beatriz “Gigi” Fernández fue exaltada en el 2010.

En el caso de Pasarell, su inmortalización se debió a su trabajo como propulsor del deporte.

En plena carrera como una de las mejores raquetas de Estados Unidos, fue co fundador de la Asociación de Tenistas Profesionales y, tras su retiro, desarrolló lo que hoy día es uno de los torneos más importantes en el tenis mundial: el BNP Paribas Open en Indian Wells, California.

“Soy un individuo afortunado, que he sido bendecido por una maravillosa vida, una gran familia, y grandes amigos”, fueron de las primeras palabras de Pasarell.

Como había adelantado, el mensaje de Pasarell fue de agradecimiento a todos los que, de alguna manera u otra, le dieron una mano a través de una vida ligada al tenis. Pasarell, natural de San Juan, gozó de la compañía de sus padres Charles y Dora, de 95 y 92 años, respectivamente.

“A ambos, gracias por proveerme a mí y a mi hermano Stanley con una casa de amor, una buena educación y por habernos conducido al tenis a una edad temprana”, expresó Pasarell.

“Esta exaltación al Salón de la Fama del Tenis internacional es, para mí, el último honor y reconocimiento que puedo recibir en este deporte. Solamente imaginarme ser incluido en este salón junto a tantas leyendas e increíbles individuos como Arthur Ashe, Billie Jean King, Jack Kramer, Pancho Gonzales, Tony Trabert, Chris Evert, Stan Smith, Butch Buchholz; todos los grandes australianos como Rod Laver, Mal Anderson, John Newcombe, Tony Roche, Allan Stone, Ken Rosewall, Owen Davidson y, claro, mi capitán en la Copa Davis y gran amigo, Donald Dell. Realmente es un gran honor”, declaró Pasarell.

La presentación del puertorriqueño estuvo a cargo de Jeanny Moutoussamy, viuda de Ashe. Moutoussamy destacó que de Ashe aún estar vivo, sería el afamado ex tenista quien hubiera presentado a su gran amigo Pasarell.

Incluso, Moutoussamy aludió a una leve lluvia que detuvo la ceremonia por algunos minutos justo antes de la exaltación de Pasarell como un acto de presencia de Ashe en Newport.

“Estoy segura que esa lluvia fue, definitivamente, intervención divina de Arthur. Pero eran lágrimas de alegría, Charlie, eran lágrimas de alegría”, dijo Moutoussamy en una emotiva presentación.

Junto a Pasarell, el pasado sábado fueron exaltados también Martina Hingis, Thelma Coyne Long, Cliff Drysdale e Ion Tiriac.