Este domingo de madrugada, cuando suene el silbatazo inicial para marcar el inicio del partido entre Puerto Rico y Sudán del Sur en París, Francia, la cuenta se detendrá en casi 20 años, desde la última vez que una Selección Nacional del patio participó en el baloncesto de unos Juegos Olímpicos.

El Equipo Nacional masculino, número 16 del mundo, se tirará al tabloncillo este domingo a las 5:00 a.m., hora en la isla, para enfrentar a los sudaneses, quienes ni siquiera tenían una nación a la que representar cuando el 28 de agosto de 2004, exactamente hace 19 años con 11 meses, Puerto Rico cayó 85-75 ante Grecia en su último partido en dicho escenario.

Los boricuas concluyeron sextos en esos Juegos de Atenas 2004, cuyo torneo de baloncesto arrancó dos semanas antes con un bombazo al vencer Puerto Rico en el choque inicial al poderoso conjunto de Estados Unidos, primera ocasión en que los norteños perdían un partido en el básquet olímpico desde el estreno de los jugadores de la NBA en Barcelona 1992. Carlos Arroyo, con solo 24 años y como armador del combinado patrio, cargó a los boricuas en ese partido.

Ahora, a sus 44 años y como gerente general del Equipo Nacional, intentará que sus muchachos eviten ser los sorprendidos por un conjunto del continente africano que hace 13 años no existía como país, y que desde su entrada al básquet internacional, lo ha hecho de manera contundente abriendo los ojos de la comunidad deportiva del globo.

Sudán del Sur, clasificado número 33 en el ranking actual de la Federación Internacional de Baloncesto (FIBA), logró su boleto directo a los Juegos Olímpicos de París 2024 desde el año pasado, al concluir la pasada Copa del Mundo de Baloncesto FIBA 2023 como el equipo africano de mejor posición en dicho certamen.

Los sudaneses, que terminaron en la posición número 17 en esa competencia mundialista, casualmente vuelven a ser los primeros rivales de Puerto Rico en un torneo internacional de la FIBA. Hace solo 11 meses se midieron en el primer choque de la fase preliminar de la Copa del Mundo en Filipinas, donde ambos jugaron como parte del Grupo B.

En esta ocasión, ambos equipos comparten el Grupo C junto a Estados Unidos y Serbia, primer y cuarto clasificados del mundo, respectivamente.

En dicho enfrentamiento del Mundial 2023, la Selección Nacional tuvo que sudar extra luego de pasar un susto, al verse abajo por hasta 12 puntos durante el último cuarto del partido. Una reacción vigorosa de los boricuas los llevó a empatar la pizarra 74-74 con menos de tres minutos por jugarse, pero fueron necesarios cinco minutos adicionales en un periodo de prórroga.

Puerto Rico se impuso finalmente 101-96 gracias a una arrancada de 10-1 al inicio del tiempo extra, incluyendo dos triples de Stephen Thompson.

Fue un gran debut para Sudán del Sur en el escenario mundialista, por lo que llegará a las Olimpiadas con algo más de experiencia y tras lucir bien durante sus partidos preparatorios, incluyendo una apretada derrota 101-100, ante Estados Unidos hace menos de una semana.

“Ese equipo viene de haber tirado un macramé frente a Estados Unidos. Viene de perder un juego por un punto nada más. Es impresionante porque eso le da una motivación total. Es un equipo incómodo, híbrido. Que ese estilo de juego nos crea demasiados problemas a nuestro estilo”, comenzó analizando el dirigente Tony Ruiz, a petición de GFR Media, el primer compromiso de los boricuas en los Juegos de París.

“Nosotros hemos tenido cuatro juegos de práctica, de los cuales no hemos ganado ninguno, y me imagino que hemos hecho la asignación con las correcciones en el momento”.

En efecto, la Selección Nacional, que viene de lograr sensacionalmente su clasificación a París 2024 en el Repechaje Olímpico celebrado en la isla, derrotando en la final por el único boleto al favorito Lituania, viene de perder 107-84 ante España, 103-93 frente a Canadá, 90-75 contra Australia, y 67-65 ante Grecia.

Ruiz, un veterano técnico con experiencia en la liga local del BSN y en otros circuitos en el extranjero, sabe que perder los juegos de fogueo no es razón de alarma.

“A mí lo que me preocupa mucho es que veo un equipo totalmente diferente al que vi en Puerto Rico. Lo veo con lapsos defensivos. Acá (en el Repechaje Olímpico) la defensa estuvo bien presente, permitiendo nada más que 67 puntos (promedio). Allá (en los fogueos) dos equipos nos anotaron sobre 100 puntos. Es verdad que son juegos de práctica, pero son también juegos que sirven de barómetro”, advirtió Ruiz.

Ruiz mostró suma cautela con Sudán del Sur no solo por el nivel de juego que han exhibido tanto en el pasado Mundial como en el reciente fogueo contra Estados Unidos, conformado por estrellas de la NBA como LeBron James, Stephen Curry, Jayson Tatum, Kevin Durant y compañía. Sino también por su tipo de juego, que suele complicar el panorama a sus rivales.

“Nuestra defensa es lo que nos va a dar nuestra ofensiva. El tiro largo es nuestra fortaleza pero nuestra defensa siempre nos va a dar nuestra ofensiva. Sudán del Sur es un equipo alto, híbrido, y que se le hace incómodo a cualquiera. Y a nosotros siempre nos dan problemas los africanos”, agregó Ruiz recordando las históricas batallas que libró la Selección Nacional boricua contra Angola en décadas pasadas.

Y en años recientes han entrado en la escena también otros equipos de ese continente como Ghana y Nigeria.

“El baloncesto se ha globalizado. El talento ya está globalizado en todo el mundo. Uno tiene que respetar al contrincante. Ese es el juego a ganar para Puerto Rico, el más importante, porque después nos tocan Serbia y Estados Unidos”, dijo Ruiz.

Por esa razón, el también analista de juegos para la televisión entiende que Puerto Rico no solo debe partir de su defensa, sino que en lo relacionado a la ofensiva, debe apostar a su juego de la carrera. Sin embargo, reconoce que a diferencia de los conjuntos europeos, los sudaneses también son un equipo rápido que gusta correr.

“Lo que pasa es que ese es nuestro juego”, dijo sobre el estilo de la carrera. “Esa es nuestra marca. Puerto Rico tiene que hacer las cosas pequeñas, grandes: la ejecución, enfatizar en la defensa, y en los rebotes, porque ellos son más altos que nosotros. No podemos jugar el juego de rachas. Tal vez ellos juegan un juego en el que sacan ventaja y no la protegen. Y entonces, ahí es que nuestra experiencia y nuestro millaje nos debe servir para tener control”.

Fue eso lo que le sucedió precisamente a Sudán del Sur contra Estados Unidos, al que estuvo dominando por 14 puntos al concluir la primera mitad, y durante parte del tercer periodo.

“La esencia realmente de nuestro equipo debe ser la defensa”, recalcó Ruiz trayendo a colación que eso fue lo que le dio a la Selección el boleto olímpico superando a potencias como Italia y Lituania en el Coliseo de Puerto Rico José Miguel Agrelot.

“Defensivamente tenemos que detener al equipo, dominar el área de la pintura, y no dar ningún tipo de libertades, porque va a ser un juego sumamente importante en el que nos las jugamos todas”.

Ruiz dijo que sobre todo habrá que cuidarse del armador Carlik Jones, que le dio problemas a Estados Unidos en el fogueo, y a Puerto Rico en el pasado Mundial.

Ese enfrentamiento entre boricuas y los sudaneses fue un juego gigantes para Thompson, con 21 puntos y 13 rebotes. Tremont Waters tuvo 19 puntos y 10 asistencias, George Conditt agregó 18 unidades y 11 capturas en los tableros, e Ysmael Romero aportó 16 tantos y 12 rebotes. Los cuatro son parte de esta edición olímpica de la Selección, en la que repiten un total de nueve canasteros de los que jugaron en la Copa del Mundo en Filipinas en 2023.

Además de los anteriores cuatro, están presentes en París 2024, Jordan Howard, Aleem Ford, Chris Ortiz, Isaiah Piñeiro y Arnaldo Toro. Pero, entre otras figuras, esta vez la Selección sí cuenta con el armador enebeísta José Alvarado, que terminó reconocido como el Jugador Más Valioso del Repechaje Olímpico.

Sudán del Sur, por su parte, es un equipo de mucha ofensiva como lo demostró desde su debut mundialista el año pasado. En ese torneo en Filipinas promedió 89 puntos en los tres partidos de la ronda preliminar, y terminó con balance de 1-2. Luego jugó en la ronda de consolación otros dos juegos y se despidió con triunfos sobre Filipinas y ante Angola, cerrando el torneo con media de 91 puntos. Terminó en la posición número 17 del total de 32 equipos que participaron.

Su baloncesto los ha puesto en el mapa mundial con apariciones de estreno en el campeonato continental de la FIBA AfroBasket 2021, en la Copa del Mundo 2023 y en los Juegos Olímpicos en París 2024.