Anticipan una épica final del Abierto de Francia entre Carlos Alcaraz y Alexander Zverev
Mientras el español persigue su tercer título Grand Slam, el alemán busca por su primero.
PUBLICIDAD
París. Cuando Carlos Alcaraz era un niño en España, algo que fue reciente al considerar que apenas tiene 21 años., corría a su casa tras su jornada escolar y prendía la televisión para ver el Abierto de Francia.
Mucho antes de aprestarse para enfrentar a Alexander Zverev en la final del domingo en París, Alcaraz observó muchísimos partidos disputados por Rafael Nadal, desde luego, con su compatriota coleccionado una cosecha récord de 14 títulos en Roland Garros.
“Quería poner mi nombre con el de los españoles que ganaron este torneo, y no sólo Rafa (Nadal)”, relató Alcaraz, al mencionar también campeones como Juan Carlos Ferrero (su actual entrenador, Carlos Moyá y Albert Costa. “Son leyendas de nuestro deporte”.
Relacionadas
Podría unirse a ellos pronto.
Alcaraz ya se consagró en el cemento del Abierto de Estados Unidos en 2022, y en el césped de Wimbledon en 2023, y ahora está a una victoria de alzar el trofeo de campeón en la arcilla roja de la cancha Philippe Chatrier en el suroeste de París. Podría convertirse en el hombre más precoz que atesora un campeonato de Grand Slam en las tres superficies; de hecho ya es el más joven en alcanzar las finales en cada superficie.
El alemán Zverev, por su parte, intenta conquistar su primer cetro en un Slam. Le tocó salir derrotado ante Dominic Thiem en la final del US Open de 2020, dejando escapar una ventaja 2-0 en sets.
“Lo he dicho antes y lo digo otra vez: no estaba preparado. No estaba preparado para ganar mi Grand Slam. No había madurado lo suficiente, era quizás muy niño todavía. No sabía lo que significa el momento. Y por eso perdí”, recordó Zverev sobre lo ocurrido en un casi vacío estadio Arthur Ashe durante la pandemia de COVID-19. “Ahora tengo 27 años, tengo más edad. Si no es ahora, ¿entonces cuándo?”
El duelo entre Alcaraz — el tercer preclasificado — contra Zverev — el cuarto — también marca la primera final de Roland Garros desde 20024 sin la presencia de al menos uno entre (ocasionalmente los dos) Nadal, Novak Djokovic o Roger Federer.
Alcaraz admira inmensamente a esos señores — colectivamente conocidos como los Tres Grandes del tenis, cada uno con el logro de haber completado el Grand Slam en sus carreras y dueños entre esos de un total de 66 títulos en las grandes citas — y quiere emularles.
“Siempre he querido ser uno de los mejores tenistas del mundo. Si quiero ser uno de los mejores del mundo tengo que ser excelente en cada superficie, como lo hizo Roger, Novak, Rafa, (Andy) Murray. Los mejores del mundo rinden en cada superficie”, señaló Alcaraz.
“Me considero un jugador que se adapta muy bien cada superficie”, prosiguió. “Crecí jugando en tierra, pero me siente más cómodo en cemento, por ejemplo”.
Tanto Alcaraz, quien venció a Jannik Sinner en cinco sets en su semifinal el viernes, como Zverev, quien derrotó en cuatro a Casper Ruud, son formidables en polvo de ladrillo.
Zverev está inmerso en una racha de 12 victorias en la superficie, incluyendo su consagración en el Abierto de Italia el mes pasado y un triunfo ante Nadal en la primera ronda en París. Ha alcanzado las semifinales de Roland Garros en cada uno de los últimos cuatro años.
Alcaraz fue el primer hombre capaz de vencer a Nadal y Djokovic en el mismo torneo de arcilla, al eliminarles en duelos consecutivos rumbo al título del Abierto de Madrid de 2022.
“Si estás en una final de los Grand Slam, mereces estar ahí”, sostuvo Zverev. “Eso va para ambos”.