Yauco.  Alexis Casiano Orengo se levanta antes de que salga el sol, se pone los tenis y sale corriendo desde su casa, en el barrio Susúa Baja, hacia la pista atlética ubicada dentro del parque de pelota Ovidio “Millino” Rodríguez. 

En el trayecto va esquivando hoyos, tarea compleja en la oscura madrugada, por lo que cuando no tiene éxito sufre caídas. Las cicatrices en sus rodillas son prueba de ello. 

Pero Alexis no se amilana; se sacude y continúa. De ordinario, le toma 25 minutos llegar a su destino. Para entonces, el reloj marca las 5:00 a.m. y con tres millas ya en el cuerpo, este yaucano de 37 años de edad está listo para entrenar.

Correr es su vida, por eso repite esta rutina día a día. En las tardes también corre y si no aparece quien le dé pon hasta la pista, llega caminando. Así de perseverante es.

“Yo empecé a correr a los 12 años aquí mismo en Millino. Fue un maestro de la escuela intermedia, llamado José Nelson, quien me dijo ‘tú puedes’ y yo le decía ‘yo no puedo por la condición’ y él seguía ‘tú puedes’. Y así seguí corriendo”, relató Alexis desde las gradas del parque antes de una práctica vespertina.

La “condición” a la que se refiere es que tiene las extremidades del lado izquierdo de su cuerpo más cortas que las del lado derecho. La mano está encorvada hacia adentro y el pie virado hacia afuera. También tiene discapacidad intelectual leve.

“Palillo”, como le llaman, lo intentó y pudo. Cuando se supo capaz, no miró más hacia atrás. Continuó corriendo en la escuela superior y en el 2002 otro educador lo llevó al próximo nivel: Special Olympics Puerto Rico.

“Un maestro, Santos Morales, de Yauco, fue el que me vio aquí corriendo y me dijo ‘tú puedes ir a Olimpiadas Especiales’ y me ayudó, me llenó los papeles”, recordó. 

Su trayectoria en esta organización es encomiable. Como parte de la delegación de Puerto Rico, acudió a los Juegos Mundiales de Verano de Olimpiadas Especiales en Irlanda (2003) y China (2007), y también ha corrido en México. En julio próximo irá a sus terceros Juegos Mundiales en Los Ángeles, California.

“Voy a correr 5,000 metros y medio maratón, que son 13 millas”, dijo Alexis, quien vive con su madre Ada Orengo y vende latas para poder comprarse ropa deportiva. 

“Estoy ready para traer la medalla de plata, si no, bronce”, sentenció el ganador de plata de las carreras de 1,500 metros y 5,000 metros en los Juegos de Puerto Rico 2015.

Mantener un registro diario de sus ejecutorias en la pista le ayuda a buscar mejores tiempos. Su entrenador, Víctor Bonilla Colón, lo monitorea vía telefónica, pues reside en Caguas.

“Las expectativas (para Los Ángeles) en cuestión de tiempo son menos de 24 minutos en 5,000 metros y en el medio maratón quiero que esté tirando una hora 56 minutos, una hora 57 minutos, por ahí”, comentó el maestro de educación física adaptada.

Luego de esa competencia, lo prepararán para correr un maratón, que es su sueño.

“Alexis es un atleta perseverante, disciplinado, es un guerrero. Es un ser humano especial”, manifestó su otra entrenadora, Ivette Rivera Santos.