Irad Ortiz: “este es mi mejor año, sin duda”
El jinete boricua es un claro favorito para ganar su cuarto premio Eclipse en los últimos cinco años.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 2 años.
PUBLICIDAD
Irad Ortiz ha tenido años destacados, pero ninguno tan sobresaliente como el del 2022, reconoció el propio jinete durante unas vacaciones en Puerto Rico antes de retomar las pistas en Miami, en donde el 23 de enero coleccionará, seguramente, su cuarto premio Eclipse por lo logrado en el corriente año.
“Ha sido un año único. Tuve los mejores números en mi carrera. Tuve buenos caballos también. Le doy gracias a Dios por mantenerme saludable”, dijo el jinete que monta en la hípica de Estados Unidos.
Ortiz estableció una nueva marca de victorias clásicas para Norteamérica con 77, incluidas 49 de grado, como se le conocen a las más importantes, como las carreras de la Triple Corona estadounidense y del evento Breeders Cup. De hecho, Ortiz ganó una de las patas de la Triple Corona, el Belmont Stakes, montando a Mo Donegal, y tres carreras de la Breeders Cup, incluyendo la más importante para dosañeros con Forte.
También reestableció la marca de dinero producido por montas en Norteamérica con $36,085,259. La marca era de él mismo en el 2019 con $34,109,019.
Y lidera la hípica estadounidense con 305 victorias. Nadie más que él, entre cientos de jinetes que montan entre Canadá y todo Estados Unidos, llegará a 300 victorias en el 2022. De hecho, es la séptima vez corrida que llega a 300 victorias y la quinta vez en línea que lidera Norteamérica en primeros lugares.
En fin, Ortiz mantuvo su dominio al tiempo en que elevó la vara, lo que es suficiente para considerar el 2022 su mejor temporada desde que llegó a Estados Unidos en el 2011 a los 18 años desde el barrio La Gloria en Trujillo Alto y egresado de la escuela vocacional hípica Agustín Mercado Reverón.
“Creo que podemos describir el 2022 como mi mejor año. Los últimos cuatro años han sido buenos. El negocio ha sido bueno. Pero éste es el mejor año, sin duda”, dijo.
Ortiz se descató en el 2022 con caballos como Life is Good, ganador de cuatro clásicos de grado, así como la potranca Nest, el velocista sobre grama Golden Pal y el potro Forte, que se descató en el 2022 al punto de que es el temprano favorito para el Kentucky Derby del 2023. Otro logro intangible de Ortiz en el 2022 fue su debut en el hipódromo Ascot de Inglatrera, particularmente en el evento Royal Ascot, que es, discutiblemente, el evento más prestigioso en la hípica mundial.
“Royal Ascot fue bien especial para mí. He ido a muchos hipódromos, pero ninguno como el Ascot. Está bien fuera de lo que estamos acostumbrados a ver. El respeto que le tienen en Ascot al deporte es diferente. La reina, Isabel, que falleció, amaba el deporte de los caballos y eso creció allá con un respeto tremendo. La manera en que tratan a los jinetes, de la forma en que está diseñado el hipódromo, el cógido de vestimenta, que es una de las cosas por las que Ascot es grande, son cosas que nunca había visto”, dijo el jinete que también ha ido a montar a Canadá, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes.
Ha sido tan buena la temporada 2022 que los premios Eclipse ya pueden comenzar a grabar el nombre Irad Ortiz en el trofeo que premia al jinete más destacado de Norteamérica y Puerto Rico durante la temporada. Los Eclipse pueden adelantar el premio porque Ortiz cumple con los dos primeros requisitos para el mismo: dinero producido y victorias.
La ceremonia de premiación será el 23 de enero en Palm Beach y allí estará el boricua junto a su familia anticipando su cuarto Eclipse en las últimas cinco temporadas.
“Nunca nos gusta adelantarnos, pero sí estamos bien positivos. Los números están ahí, que es lo que se necesita para ganar el Eclipse. Sabemos que tenemos muchas oportunidades de ganar nuestro cuarto Eclipse. Después que los números estén ahí no hay más que decir. Es un logro para mí y y mi familia. Es algo para lo que trabajo”, dijo el jinete de tercera generación.
Con un cuarto Eclipse, Ortiz se acerca al legendario jinete panameño Lafitt Pincay, hijo, en el segundo lugar entre los jinetes más ganadores del premio. Pincay ganó cinco. El líder de todos los tiempos es el legendario estadounidense Jerry Bailey con siete. Entre los boricuas, Ortiz ya es el máximo ganador de Eclipse, por encima de los miembros del Salón de la Fama, el activo John Velázquez, quien ha ganados dos, y de Ángel ‘Junior’ Cordero, quien se retiró con dos premios.
Ortiz tiene 30 años y está adelantado en cuanto a premios se refiere en comparación con Bailey y Pincay, hijo. Bailey ganó su cuarto Eclipse a los 43 años. Pincay logró su cuarto a los 33.
Se puede anticipar que con salud y experiencia, el negocio de Ortiz puede seguir mejorando en años por venir. De ser así, Ortiz podría elevar más la vara de las estadísticas y seguir acumulando premios Eclipse.
Él reconoce que no se lo sabe todo, que todavía puede entender mejor a sus caballos, y que tiene espacio para mejorar.
“Uno va ganando experiencia y estamos más preparados que en años atrás. Tengo más experiencia en mi profesión y eso me hace estar más seguro, más completo, listo para lo que venga. Se gana mucha experiencia montando, lo que uno siente en las manos. En las manos está todo. Es clave. En las manos sientes la boca del caballo y sabes qué tiene el caballo. Es una experiencia que vas ganando con el tiempo. Y he adquirido experiencia escuchando amigos míos, grandes jinetes. Cualquier consejo que me den trato de cogerlo. He ido mejorando en eso. Tengo cosas que me faltan por corregir. Seguimos puliéndonos para tener el paquete completo, con todas las herramientas”, dijo.
Reconoce, inclusive, que entre las corecciones que bebe hacer es bajar un poco de agresividad en su estilo de montar, el que le ha costado múltiples suspensiones que, a su vez, le restan montas para acumular más estadísticas.
“Mucha gente dice que monto un poco agresivo, y es algo que he tenido que ir modificando en base a reglamento que nos rige a nosotros. Gente que me quiere ver bien, me ha dado consejos para eso. He ido mejorando un madurando en esa faceta. Y creo que ahora mismo estamos bien lejos de que éramos hace tres años. Ahora sigo montando agresivo, pero con más calma, pensando más cada decisión que tomo para tratar de coger las menos suspensiones posibles. En años anteriores me limitaba a hacer ciertos números por las suspensiones. Hoy en día he corregido eso y gracias a Dios estamos viendo los frutos”, dijo.