El hijo menor del Astro Boricua entregó en Camarero el premio del clásico Roberto Clemente
El evento fue ganado por la importada Golden Grant con la monta de Juan Carlos Díaz.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 2 años.
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Roberto Enrique Clemente, hijo menor del Astro Boricua, hizo entrega ayer domingo del clásico Roberto Clemente en el hipódromo Camarero.
Le acompañó su esposa Lorna y la nieta de Roberto Clemente, Raisa Clemente.
El clásico fue ganado por el tercer candidato Golden Grant, que es propiedad del Sonata Stable, entrenado por José Dan Vélez y montado por Juan Carlos Díaz.
A nombre de Roberto Enrique se dirigió su esposa.
“A nombre de la familia Clemente le damos las gracias a Camarero por invitarnos nuevamente. Este es un año distinto porque es la primera vez que entregamos el premio sin doña Vera y uno especial porque se conmemora el 50 aniversario de la muerte de Roberto también. Siempre apoyamos al hipódromo y llevamos el legado de Roberto”, dijo en la ceremonia de premiación transmitida por televisión.
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Doña Vera Zavala viuda de Clemente falleció en el 2019.
El clásico Roberto Clemente celebró su edición 49 el domingo el honor al expelotero, hombre humanitario y dueño de caballo que tuvo bajo su propiedad al ejemplar importado Champion Bate en el establo Bucanero en su poder dentro del hipódromo El Comandante en Carolina.
La familia Clemente es por lo general representada por el hijo mayor del Astro Boricua, Luis Roberto y doña Vera, siempre que estuvo disponible. El Clásico comenzó a celebrarse en el 1973 y domingo cumplió su edición 49 con el triunfo de Golden Grant 1 1/16 de milla en la pista de Camarero en Canóvanas.
Golden Grant partió como tercer candidato y superó a la favorecida Luna Fortis y a la segunda candidata Media Luna en la carrera que marcó la séptima carrera del programa dominical.
Golden Grant fue importada hace tres semanas a Puerto Rico desde Nueva Jersey, en donde estuvo compitiendo por última vez en Estados Unidos.
“Quiero felicitar al establo de José Dan Vélez y a los muchachos de su cuadra que hacen un trabajo excelente, así como a su jinete. Esta yegua, creo, que le faltaba un poco más de tiempo aquí porque fue ajorada en su viaje. Marc (Tacher) confió mucho en esta yegua y puso mucho empeño en comprarla. Lo felicito también porque yo mismo estaba dudoso”, dijo Fred Delbery, del Sonata Stable en representación de su propietario Marc Tacher.