Gran Serie Hípica
El evento caribeño celebrado en Panamá sacó a relucir nuevamente la calidad de la región.
![Arquitecto finalizó tercero en la Copa Confraternidad, la mejor actuación entre los ejemplares boricuas en la Serie. (Suministrada)](https://www.primerahora.com/pf/api/v3/content/fetch/image-resizer-v1?query=%7B%22website%22%3A%22primera-hora%22%2C%22imageUrl%22%3A%22https%3A%2F%2Farc-anglerfish-arc2-prod-gfrmedia.s3.amazonaws.com%2Fpublic%2FICA7HPLB5ZEEDJAAEEDK7U54VI.jpg%22%2C%22width%22%3A2560%2C%22redirect%22%3A%221%22%2C%22external%22%3A%221%22%7D)
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 12 años.
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La Serie Hípica del Caribe se llevó a cabo el pasado fin de semana en Panamá y dejó, como es costumbre, un buen sabor en lo que respecta a la lucidez del evento.
El Clásico del Caribe es la carrera principal del grupo de cinco eventos que componen la Serie. La prueba, que inició en Puerto Rico en 1966, es la de mayor antigüedad.
México, Panamá y Venezuela salieron airosos en la Serie dividiendo honores en las carreras, mientras que Puerto Rico no pudo ganar y sus mejore actuaciones fueron un tercer puesto en la Copa Confraternidad y una cuarta posición en el Clásico del Caribe.
La delegación equina boricua contó con cinco ejemplares que participaron en tres de las cinco carreras de la Serie. El triplecoronado Arquitecto y el ganador clásico Son De Goma captaron la atención de los entendidos en materia hípica en Panamá.
Arquitecto figuró como uno de los favoritos para la Copa Confraternidad debido a la excelente condición que logró mantener bajo el cuidado de su mozo de cuadra allá, Wilfredo Agosto, y su entrenador José Dan Vélez, quien trabajó arduamente para presentar al ejemplar con un físico óptimo.
Pero la carrera no resultó como se esperaba y quedó penúltimo desde temprano. Arquitecto, montado por Juan Carlos Díaz, hizo su avance desde que restaban 800 metros para el final y se colocó tercero entrando a la recta de llegada, pero no pudo mejorar de ahí.
La ganadora Dicky’s Angel dominó por más de diez cuerpos en un impresionante desempeño tras competir seis días antes en un clásico, en el que llegó en el segundo puesto.
El tercer lugar logrado por Arquitecto es la segunda mejor labor de un ejemplar local en una prueba internacional fuera de Puerto Rico, luego del segundo alcanzado por Punta Salinas Bay en el Clásico del Caribe de 1974, celebrado casualmente en Panamá.
Son De Goma, por su parte, se perfilaba con buenas posibilidades de figurar muy bien en el Clásico. Físicamente se veía impecable de condición, al cuidado de Carlos Landrau y el entrenador Máximo Gómez.
Son De Goma tuvo una carrera perfecta. Iba bien ubicado durante la primera mitad de la carrera, su jinete Luis Hiraldo inició su movida desde los 700 metros finales y el ejemplar respondió adelantando por afuera de los punteros.
Entró a la recta final en lucha por la segunda posición y parecía tener grandes posibilidades de capitalizar, pero en los últimos 150 metros se rindió y terminó en un honroso cuarto puesto.
Harlan’s Pure, en la Copa de Importados; Reddish Thunder, en el Caribe; y Don Carlos R. en la Confraternidad no rindieron las carreras que posiblemente se esperaban, pero representaron la hípica local y merecen distinción.
Así como también todos los que acompañaron a la delegación boricua, ante los que nos quitamos el sombrero por el gran trabajo realizado.