Desde el 2007, el River Plate-Puerto Rico siempre esperó por una oportunidad de medirse a los Islanders.   Y este año no solamente la tuvieron, sino que los dominaron por 180 minutos.

El River boricua se proclamó  campeón de la Supercopa DirecTV al derrotar a la Tropa Naranja, 2-0, en el partido de vuelta frente a alrededor de 1,500 personas que gozaron del nacimiento de una gran rivalidad en el  fútbol puertorriqueño.     Los rojiblancos ganaron la eliminatoria de dos partidos por un marcador global de 3-0.

La Supercopa es el primer título para  River a nivel profesional, ya que había fallado en ganar la Puerto Rico Soccer League desde que la liga inició en el 2008.  Pero anoche no solamente “libró la coca”, sino que lo hizo frente al club más grande de la Isla.

Anoche, River nunca estuvo en apuros.  El club, dirigido por  Walter Fabián Zermatten, a sabiendas de  que tenía la ventaja de 1-0 adquirida en la ida, se paró sólido en defensa, esperando por cualquier oportunidad para irse en escapada.

Y así llegó el primer gol del partido, cuando en el minuto 35  Alejandro Russo se fue en escapada y, fuera del área, soltó un potente disparo que fusiló al portero naranja Cody Laurendi para el 1-0.

El gol fue como un balde de agua fría para los Islanders, que nunca encontraron un ritmo en su ofensiva.  La falta de química causada por la ausencia de los mayoría de los titulares que llevó a los naranja al título de la Segunda División era evidente y así quedó plasmado en el minuto 38, cuando el portero  Laurendi, suplente toda la temporada,  realizó una mala salida, perdió el balón, y el rojiblanco  Yaikel Pérez soltó un tiro un tiro cruzado para marcar el 2-0.

Y así continuó el encuentro, con un River seguro de sí mismo y los Islanders buscando respuestas, que nunca llegaron. Justa victoria para River, que pudo poner atrás los problemas fuera del campo, como la investigación federal en su contra por alegado uso ilegal de visas.

“Uno viene con las intenciones y entrenas siempre pensando en lo mejor.  Pero sabíamos que los Islanders era el equipo más grande Puerto Rico, que viene de salir campeón, de hacer una buena competencia en la Concacaf y tiene jugadores muy importantes.  Pero a nosotros nos salieron las cosas bien”, dijo tras el encuentro el portero de River, el argentino Mariano Graziano, quien se llevó la blanqueada.