Río de Janeiro. Por instantes, parecía que esta Copa Mundial estaba destinada para Argentina. La Albiceleste superó obstáculo tras obstáculo, Lionel Messi finalmente apareció en este escenario, y la imagen de levantar el trofeo en la casa del eterno rival se veía más clara que nunca.

Pero no pudo ser. En el fútbol, especialmente en una final de la Copa del Mundo, no se pueden desperdiciar oportunidades. Argentina las tuvo ayer, pero no las aprovechó. El resultado fue una derrota, 1-0, contra Alemania en tiempo extra.

“Tuvimos un sueño grande de llegar a la final. Sin dudas, queríamos ganarla. Pero, para ser perfectos, tenemos que ser más eficientes”, declaró el técnico de Argentina, Alejandro Sabella, en conferencia de prensa pospartido.

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“Lo que necesitábamos era eficiencia, pero no tengo más nada que añadir. Estoy muy orgulloso de los muchachos, que jugaron una Copa Mundial extraordinaria. Fue bien emocionante ver cómo lo dieron todo por la camisa argentina. Así que, más allá del dolor de la derrota, creo que pueden mirarse en el espejo y pueden decir que dieron todo por el grupo”, abundó el timonel.

Argentina rozó la gloria pese a que fue Alemania la que mandó con el esférico y generó más peligro. Pero los gauchos tuvieron las oportunidades más claras, y hasta vieron un gol anulado en la primera parte por un fuera de juego de Gonzalo Higuaín.

Además, la gran sorpresa fue la actuación de una defensa argentina que no muchos veían como su fortaleza. La Albiceleste solo encajó cinco goles en siete partidos, y en la etapa de cruces solo encajó la anotación de ayer.

Eso, en cierta manera, hizo el revés más doloroso.

“Tuvimos las mejores chances. Dimos hasta donde nos aguantó el físico. Es inmenso el dolor… Nos vaciamos”, expresó el mediocampista defensivo Javier Mascherano tras el partido. “Dimos lo que pudimos y lo lamento por nosotros y por la gente. No tuvimos esa cuota de suerte y se quedaron con la Copa”, añadió Mascherano.

Sabella también aludió al desgaste físico al cual se expuso Argentina. Los gauchos jugaron su semifinal el miércoles y tuvieron que jugar 120 minutos contra Holanda, mientras que Alemania se había clasificado el martes tras golear a Brasil por 7-1.

“Creo que tuvimos las oportunidades más claras, pero jugamos dos tiempos extras, y jugamos un día más tarde. Lo único que puedo hacer es felicitar a mis jugadores, hicieron un trabajo extraordinario. También felicitar a Alemania por su título”, sentenció Sabella.