El Manchester United montó una reacción bravía que sin embargo fue insuficiente para conseguir el empate que evitaba la eliminación en la Liga de Campeones el martes, durante una jornada que incluyó un triunfo de Cristiano Ronaldo sobre Lionel Messi en un año de copiosos bochornos para el Barcelona.

Los Red Devils, tres veces monarcas de Europa, marcaron dos tantos en los últimos 10 minutos para maquillar la derrota sufrida en Leipzig, que se impuso por 3-2 y los dejó fuera de los octavos de final. El club alemán se clasificó a la ronda siguiente, con una ventaja de tres puntos sobre el United en el Grupo H.

Paul Pogba ingresó en la cancha cuando restaba media hora de partido. El marcador estaba 3-0 y parecía sentenciado para un United que requería únicamente de un punto para instalarse en los octavos de final.

Bruno Fernandes convirtió un penal a los 80 minutos y el francés Pogba acercó más a los 82, unos días después de que su agente Mino Raiola sugirió que el jugador quería marcharse del Man U.

“En cuanto el agente de Paul se percate de que éste es un deporte de equipo y trabajemos jugos, todo será mejor”, sentenció el técnico del Man U, Ole Gunnar Solskjaer.

El equipo inglés tiene los mismos puntos que el París Saint-Germain, que sin embargo goza de la ventaja en el criterio de desempate, los duelos directos.

En la capital francesa, el duelo entre París Saint-Germain y Basaksehir de Estambul se interrumpió luego que los jugadores alegaron que el cuarto árbitro profirió un insulto racista hacia el entrenador asistente del club turco. En respuesta, los futbolistas abandonaron la cancha a los 15 minutos y con el marcador igualado sin goles.

“La UEFA, tras analizarlo con ambos clubes, decidió de manera excepcional que los minutos restantes se disputen mañana con un nuevo grupo de árbitros”, señaló la entidad rectora del fútbol europeo. “Una investigación exhaustiva del incidente ocurrido será abierta de inmediato”.

Cristiano convirtió por su parte dos penales en la goleada de 3-0 que la Juventus le endilgó al Barça.

El conjunto catalán no había caído como local dentro del torneo en siete años. El triunfo dio a la Juve el primer puesto del Grupo G, por el criterio de duelos directos ante el Barcelona, con el que igualó en 15 puntos.

Ambos equipos llegaron ya clasificados al compromiso en el Camp Nou, que sigue vacío en medio de la pandemia de coronavirus. Messi y Cristiano se abrazaron brevemente e intercambiaron algunas palabras antes del puntapié inicial.

El astro portugués abrió el marcador a los 13 minutos y logró el tercero, al comienzo del complemento y también desde los 11 pasos. Evidentemente, fue quien más disfrutó esta reedición de los duelos que libraba con Messi durante su estadía de casi una década con el Real Madrid, de cuyas filas emigró a Italia en 2018.

En las dos ocasiones, Cristiano realizó su festejo característico, con un salto y un giro de 180 grados, antes de estirar los dos brazos hacia abajo y gritar jubiloso.

“Fue un gran trabajo de equipo”, valoró el zaguero de la Juve, Leonardo Bonucci. “Cuando entras en la cancha con esta voluntad de sacrificio mutuo por el bien del equipo y tienes a alguien con la capacidad de definición de Cristiano, todo es posible”.

Messi no pudo en cambio anotar en cinco disparos a puerta. El Barcelona vio cortada una racha de 38 partidos como local sin derrota en el máximo torneo europeo. La seguidilla se remontaba a septiembre de 2013.

“Hemos entrado mal, con miedo, sin agresividad”, lamentó el técnico holandés Ronald Koeman. “Parecía que hemos entrado para no perder”.

También en el Grupo G, Dínamo de Kiev aseguró un boleto en la Liga Europa al imponerse 1-0 sobre el Fenercvaros.

La Lazio se clasificó a la fase de eliminación directa por primera vez en 20 años tras empatar de local 2-2 frente a un Brujas de Bélgica que jugó en inferioridad numérica desde los 39 minutos.

En otros resultados, Krasnodar rescató un empate 1-1 en su visita a Chelsea, que cerró invicto y clasificado la fase de grupos. Sevilla, que había avanzado también desde el Grupo E, se impuso 3-1 en la cancha de Rennes.