Yankiel Rivera conserva invicto y añade otra faja a su colección
El puertorriqueño sumó un tercer campeonato, luego de salir airoso en la cartelera encabezada por Subriel Matías en Manatí.
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Manatí. Yankiel “El Doctorcito” Rivera superó el sábado por decisión unánime al mexicano Víctor Efraín “Chucky” Sandoval para retener los títulos continentales de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y, además, agregar a su colección el Intercontinental de la Organización Mundial de Boxeo (OMB).
Los jueces vieron a Rivera dominar la semiestelar de la cartelera que se efectuó en el Coliseo Juan Aubín Cruz Abreu “Bincito”, de Manatí, con tarjetas de 98-91, 98-91 y 97-92.
De esta forma, “El Doctorcito” mantuvo limpio su récord al mejorarlo a 6-0 ante un experimentado rival que contaba con 42 combates en su resumé.
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“Estoy súper contento. Esto es algo por lo que he trabajado duro. Mañana es el Día de los Padres y mi papá en el cielo tiene que estar bien contento, así que esto es para él. (Tener otro título en apenas seis peleas) dice la calidad de boxeador que soy, el talento que tengo y que ya me tienen que mencionar entre los grandes nombres. Esto es un paso más en mi carrera”, expresó Rivera a preguntas de Primera Hora después de la victoria.
Rivera no esperó mucho para lastimar a Sandoval, pues en apenas el primer asalto conectó una recta con la izquierda que lo puso a tambalear y el referí lo decretó como caída.
El mexicano buscó desquitarse en el segundo round con una fuerte combinación al rostro del boricua, pero Rivera contrarrestó rápidamente con una zurda a la quijada de Sandoval.
Rivera continuó castigando al púgil mexicano con combinaciones al rostro mientras este estaba contra las cuerdas en múltiples ocasiones. El boricua siguió conectando con una izquierda que Sandoval parecía no tener respuestas.
La historia fue la misma por los siguientes episodios hasta que en el octavo Sandoval le pegó a Rivera un golpe en la cabeza que lo afectó y tuvo que optar por agarrarse de su rival. De igual forma, el pleito fue detenido en varias ocasiones debido a que la cinta de uno de los guantes del puertorriqueño se despegaba.
Sin embargo, Rivera mantuvo su temple y lució sólido en lo que restó del pleito.