El ex campeón supergallo de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), Wilfredo Vázquez, Jr., dijo que aunque tenía energías para concluir el combate ante Jorge Arce, estuvo de acuerdo con la decisión tomada por su padre y entrenador de detener la pelea.

“De la única manera que a mí me bajan de un ring es muerto en la raya”, dijo Vázquez, Jr., a su arribó a Puerto Rico en la mañana de hoy tras perder la faja de las 122 libras el sábado por la noche ante el púgil mexicano luego que su esquina pidiera al referí Joe Cortéz que detuviera el combate en el último asalto.

“Pero mi papá (Wilfredo Vázquez) vio que lo mejor era no coger golpes, pues tenemos un buen futuro por delante. Él sabe lo que hace, y para eso tenemos un equipo de trabajo experimentado para que tomen decisiones. Me llega a dar un nocaut feo y se me acaba la carrera. Al principio le pregunté el por qué (paró la pelea), pues estaba un poco fuera de la situación, pero cuando se sentó conmigo, me orientó. Le pregunté si tomó la decisión como padre, y me dijo que no, que la tomó como jefe de la esquina”, enfatizó Vázquez, Jr.

De igual manera, el bayamonés destacó que ve con buenos ojos una reyerta de revancha contra Arce, la cual podría materializarse próximamente en Puerto Rico.

“La próxima pelea puede que sea contra Jorge Arce en revancha. Él me dijo que quería pelear contra mi otra vez, y si él accede, yo acepto el reto y nos trepamos nuevamente para volver a intentarlo. Y esta vez se me va a ser un poco más fácil”, dijo en tono de broma Vázquez, Jr., a los medios que le abordaron en el Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín.

El púgil dijo que se tomará dos semanas de descanso para luego regresar al gimnasio y retomar su preparación para la posible revancha contra Arce.

Vázquez, Jr., utilizó gafas de sol en todo momento, pues todavía siente una fuerte molestia en los ojos ante fuentes de luz tras sufrir un rayazo de córnea, el que alega pudo deberse a un roce con el pelo de Arce, lesión que fue confirmada por el médico que lo atendió en Las Vegas al terminar la pelea.

“Le pregunté a mi papá (el ex campeón Wilfredo Vázquez) si me había caído vaselina en los ojos y que me limpiara, pero me decía que no tenía nada. Ahora voy a sacar una cita con un oftalmólogo para ver qué me dice, y el miércoles salgo para Miami para que me examinen allá también. Pero aquí no hay excusas; me ganaron bien entrenado y motivado. Si era su noche, pues que Dios se la bendiga. Pero aquí nadie le ha puesto pausa a mi carrera. Dos semanitas de descanso y después de vuelta al gimnasio”, indicó.

Se casa en Las Vegas

De igual forma, el peleador dijo que aprovechó su estadía en Las Vegas para contraer nupcias con su compañera Jacqueline Román Santana, con quien tiene una hija.

Explicó que se casaron ayer, domingo, y que próximamente, también harán una boda por la iglesia en Puerto Rico.