El boxeador británico Tyson Fury (31-0-1, 22 KOs) puso fin a su rivalidad contra el americano Deontay Wilder (42-2-1), anoche en el T-Mobile Arena de Las Vegas al triunfar por medio de nocaut en el undécimo asalto.

“Fue una gran pelea. Fue digno de cualquier trilogía en la historia del deporte. Es un gran luchador y me dio una (prueba) real esta noche”, comentó Fury, campeón lineal de peso pesado del deporte y ex campeón mundial unificado.

En el undécimo asalto, Fury abrumó a su rival americano con una mano derecha, dejándolo boca abajo en la lona a las 1:10 del undécimo asalto.

“Me atrapó dos veces en el cuarto asalto, pero nunca pensé, ‘Oh, esto se acabó’. Me sacudió, me bajó, pero eso es boxeo, y así es la vida también. No es cómo muchas veces te derriban. Tienes que seguir luchando y seguir adelante”, detalló Fury.

La lucha no fue fácil para lospeleadores. Wilder, quien vio su segunda derrota en su carrera boxística, comenzó el primer asalto con un fuerte jab, pero pareció cansarse temprano cuando no lastimó a Fury. En el último minuto del tercer asalto, Fury sorprendió a Wilder con una combinación de dos golpes que puso a Wilder de rodillas.

Fury parecía tener el control hasta finales del cuarto asalto, cuando Wilder aterrizó una poderosa mano derecha directamente en la parte superior de la cabeza de Fury, quien cayó dos veces a son de los rugidos atónitos de la multitud.

Sin embargo, Fury sobrevivió a la ronda y ambos aterrizaron golpes dañinos sin una caída en la quinta y sexta. Luego, Fury hirió a Wilder en el séptimo con una serie de golpes que enviaron a Wilder hacia las cuerdas.

Fury volvió a herir a Wilder en el octavo con dos golpes enormes, por lo que el médico lo examinó antes de permitir que la pelea continuara hasta el noveno.

Otra mano derecha dañina de Fury barrió las piernas de Wilder. No fue hasta el undécimo asalto que Fury, con una mano derecha, abrumó a su rival americano, dejándolo boca abajo en la lona.

Al finalizar el combate, Fury se subió a las cuerdas en una celebración cansada ante una multitud frenética de 15,820 fanáticos. Por su parte, Wilder aparentó estar físicamente agotado durante gran parte de la pelea, aunque perseveró y lanzó golpes poderosos.

Fury conectó 150 golpes contra los 72 de Wilder.

“No he visto el nocaut real esta noche, pero lo sentí. Le pegué con un gancho de derecha sólido y crujiente en la sien, y tiros como ese, terminan carreras. Definitivamente recibió algún castigo, así que veremos qué puede hacer en el futuro”, manifestó Fury al asegurar que la famosa rivalidad entre ambos “se acabó para siempre”.

Los púgiles se conocieron por primera vez a finales de 2018, en un combate juzgado como un empate dividido.

La segunda pelea fue en Las Vegas en febrero de 2020. El campeón británico golpeó a Wilder hasta el séptimo asalto, cuando la esquina de Wilder tiró la toalla en una victoria unilateral y Fury reclamó el cinturón del CMB de Wilder.

“Le gané tres veces. Soy un deportista y quería darle un poco de amor y respeto, y él no quería devolvérselo. Ese es su problema”, recalcó el británico.