Las Vegas, Nevada. “Vengo por todas las canicas”.

Así se expresó el mexicano Rafael Márquez a solo días de subir al ring para retar al puertorriqueño Juan Manuel “Juanma” López por el cetro pluma (126 libras) de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), en un intento por convertirse en campeón por tercera vez en su carrera.

“Vengo a jugarme todo. Me motiva ganar esta pelea. Ser campeón del mundo en una tercera división y saber que me colocaría en la lista de aquellos que lo han hecho, es muy importante para mí y por eso he trabajado muy duro para ganar éste título del mundo”, comentó Márquez poco después de hacer su entrada al hotel MGM Grand de Las Vegas sin mucha fanfarria.

“Tanto a ‘Juanma’ como a mí nos esperan grandes peleas en el futuro. Por eso nos hemos preparado muy bien y estamos en el tope del boxeo, porque queremos presentar un buen espectáculo en el ring. Sé que “Juanma” boxea, es inteligente, vivo y tiene pegada”, sostuvo Márquez, quien reinó en las 118 y las 122 libras.

El enfrentamiento entre López y Márquez estaba en agenda para septiembre pasado, pero el mexicano sufrió una lesión en el dedo pulgar de la mano derecha que forzó a que el combate fuera aplazado por casi dos meses. En lugar de perseguir a un sustituto, López rehusó aceptar otro rival que no fuera Márquez.

“Muy agradecido de López por haberme esperado y darme la oportunidad para que se diera la pelea. La quería desde que le ganó a Daniel Ponce de León”, expresó.

Como acostumbra, a pocos días para la pelea, Márquez no tiene intenciones de pisar el gimnasio nuevamente debido a que asegura haber tocado el peso máximo de 126 libras.

“Ya estoy en el peso. Me siento perfecto. Vengo bien alimentado con el fin de dar el peso antes, y aquí la edad no tiene nada que ver cuando uno se prepara bien”, sentenció.