En poco más de tres semanas, Miguel Cotto regresará al escenario que tanto disfruta.

El 26 de agosto representará el fin a la ausencia de más de año y medio de Cotto sobre un ring cuando enfrente al japonés Yoshihiro Kamegai por la faja júnior mediana (154 libras) de la Organización Mundial de Boxeo (OMB).

 Para el puertorriqueño, será el primero de tal vez dos combates antes de colgar los guantes en diciembre.

“Estoy bien en la preparación, bien en cuanto a los días de trabajo que restan. No me siento ansioso de que llegue el 26 de agosto, sino tomando las cosas día a día”, confesó Cotto ayer durante una conversación con Primera Hora desde Los Ángeles, California.

El cagüeño finalmente le pondrá punto final a una pausa en su carrera que inició después de una derrota a manos de Saúl ‘Canelo’ Álvarez en noviembre de 2015.

“Me he venido disfrutando todo desde que llegué a Los Ángeles en el 2013, así que no he perdido ningún tipo de motivación al momento de entrenar. Sigo positivo, seguiré bien y hasta el 31 de diciembre estaré bien”, sostuvo.

¿Sientes algún grado de nostalgia al saber que te quedan cinco meses como boxeador?

“No. Mucha satisfacción y trabajo, pero más que nada satisfacción al saber que he logrado más de lo que una vez pude haber imaginado. Lo que iba a hacer en mi carrera ya está llegando al final. Me queda dedicarme en cuerpo y alma a mi casa y de ahí en adelante coronar un ambiente más saludable”.