Para apreciar el legado del excampeón mundial de boxeo, Héctor “Macho” Camacho, es necesario conocer las historias que marcaron una turbulenta vida que comenzó en las calles del barrio puertorriqueño en Nueva York camino a convertirse en una legendaria figura en el boxeo rentado y que culminó con su trágica muerte en el 2012, incidente que aún no ha sido esclarecido por la Policía de Puerto Rico.

Esas crónicas quedaron detalladas en el documental “Macho: The Héctor Camacho Story” cuyo estreno será mañana, viernes, a las 10:00 p.m. por Showtime. El filme presenta entrevistas con María Matías, la madre de Camacho, así como su exesposa Amy y su hijo Héctor “Machito” Camacho Jr.

“El proceso completo es difícil porque no dejo de pensar en mi papá. Fue tremendo padre y boxeador. Me di cuenta de lo grande que fue Macho Camacho, que salió de Puerto Rico y logró cosas que otros no han podido igualar”, compartió Camacho Jr. “Mi padre dejó un legado grande en el boxeo y estoy agradecido”.

Camacho nació el 24 de mayo de 1962 en Bayamón. Era el menor de cinco hijos producto de la relación de Héctor Luis Camacho y María Matías. La pareja eventualmente se separó y ella optó por establerse en el barrio Spanish Harlem con sus cinco hijos. Durante el periodo de adolescencia, encontrar a Camacho en medio de peleas callejeras era algo común y hasta fue arrestado a los 15 años.

Esto fue el pie forzado para frecuentar un gimnasio, donde descubrió y desarrolló sus talentos en el boxeo. Camacho ganó tres Guantes Dorados de Nueva York y tuvo un impresionante récord de 96-4 a nivel aficionado.

Una vez en el profesionalismo, Camacho subió como la espuma en las clasificaciones. En 1983 noqueó a Rafael Limón para conquistar el cinturón del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), versión super pluma, en un combate que tuvo como escenario el estadio Hiram Bithorn en San Juan. Fue el momento donde Camacho saltó al estrellato.

Camacho comenzó a ganar fama y dinero durante su carrera, al tiempo que también estuvo envuelto en varios escándalos fuera del ensogado.

Mucha gente no sabía que él era alguien sumamente humilde. Todos el mundo lo quería, pero al final estaba solo. Es lo más que me molesta. Cuando estaba en la cima, la gente lo buscaba, pero cuando cayó, se fueron de su lado. Ahí es cuando uno se da cuenta de quién es quién. Lo único que buscaba era amor sano”, relató Camacho Jr. “Mi padre aguantó todo adentro y me he dado cuenta que en un mundo cruel, te usan”.

Camacho terminó con marca de 79-6-3.

El proyecto dirigido por Eric Drath, quien también estuvo a cargo de los documentales “Assault in the Ring” y “No Más”, tardó dos años en ser completado.

“Cada cual tendrá su opinión sobre el documental. Di luz verde para hacerlo para que la gente sepa quién fue Macho Camacho, una persona humilde que ayudó a muchos. Vino de la nada desde Puerto Rico y llegó a la Casa Blanca para conocer al presidente Ronald Reagan. Macho Camacho cometió mil errores y siguió hacia adelante. Demostró que nada es imposible”, indicó Camacho Jr.

Un misterio sin resolver

En noviembre de 2012, Camacho se encontraba en el asiento de pasajero de un auto cuando recibió un disparo por desconocidos. Falleció pocos días después, a sus 50 años. Los responsables no han sido arrestados. Mientras, su amigo Alberto Yamil Mojica Moreno murió en la escena.

“La culpa es de la calle. Esa fue la causa de la muerte de mi padre, pero me duele porque han pasado ocho años. Extraño su voz, lo que es estar con él. No me interesa saber quién lo mató porque abrirá una herida que no quiero abrir. Eso es demasiado para mí. Prefiero pasar la página y mirar las cosas buenas que hizo y seguir con su legado”, concluyó Camacho Jr.