Mientras Floyd Mayweather y Manny Pacquiao se preparaban  para el anticipado encuentro del sábado en Las Vegas, sus entrenadores encontraron suficiente material para estudiar las fortalezas y debilidades de cada cual. 

Esto es así porque en sus respectivos curriculums tienen a cinco rivales en común con resultados muy similares. 

A continuación, le presentamos la corta  lista, aunque la misma no ayuda a poder predecir quién ganará el sábado: 

Oscar de la Hoya

Mayweather y De la Hoya son los responsables del evento que más pay per views ha vendido en la historia.  Claro, eso podría cambiar este sábado. 

Cuando pelearon en el 2007, De la Hoya gozaba de inmensa popularidad y, a su vez, era la máxima atracción en el boxeo rentado. Ejercía su derecho a escoger a los oponentes y, cuando era campeón mundial de las 154 libras, le dio vida a The World Awaits. El MGM Grand Arena se quedó pequeño para estos dos gladiadores, aunque para algunos fue una pelea deslucida por el estilo escurridizo de Mayweather, quien se adjudicó una apretada decisión dividida  y con la victoria dio el salto a ser la superestrella del deporte de ahí en adelante.

En cuanto a Pacquiao, De la Hoya acordó medir fuerzas con él en diciembre de 2008 en lo que fue su último intento por mantener su carrera relevante,  pero resultó ser la última vez que pisó un ring como boxeador. 

La ventaja en velocidad y fortaleza del filipino abrumaron a De la Hoya, quien eventualmente decidió no continuar después del octavo episodio.

Miguel Cotto

El puertorriqueño cayó víctima de Pacquiao cuando era campeón de las 147 libras, pero aceptó hacer el combate en 145 libras y bajo la dirección del novato entrenador  Joe Santiago. 

Cotto inició bien cuando le cortó el paso a Pacquiao para castigar su anatomía. No obstante, el filipino tardó poco en imponer su mortal pegada y derribó al boricua una vez en el tercer asalto y una en el cuarto.

Ambos se castigaron durante los subsiguientes episodios, pero fue Cotto quien recibió la peor parte hasta que el referí Kenny Bayless intervino para detener la pelea en el duodécimo a favor del filipino.

Cotto y Mayweather prácticamente subieron juntos cuando pertenecían a Top Rank, empresa del promotor Bob Arum. Pero para el 2012, Mayweather estaba por su cuenta y escogió a Cotto como su rival cuando el cagüeño era monarca de las 154 libras y quedó como agente libre.

El puertorriqueño presentó un agresivo plan de pelea que, en ocasiones le rindió frutos dentro del ring, no obstante, Mayweather lo superó en los asaltos finales camino a una decisión unánime a su favor.

Shane Mosley

Si alguien podría, hasta cierto grado, igualar la velocidad de manos de Mayweather era Mosley. Sin embargo, se equivocaron. Mosley solo tuvo un buen momento cuando conectó una derecha que estremeció a Mayweather en los primeros asaltos, pero desde ese momento, quedó neutralizado por le magistral defensa del invicto campeón. 

Era evidente que, a sus 38 años, los mejores días de Mosley estaban en el pasado.

En un intento desesperado por mantener relevante su carrera, Mosley aceptó enfrentar a Pacquiao en el 2011. El grave problema fue que el filipino estaba en el mejor momento y, simplemente, abrumó al estadounidense. Pacquiao no le ofreció oportunidades a Mosley, quien visitó la lona, algo poco usual en su carrera. 

Al final de los 12 asaltos, Pacquiao se apuntó una cómoda victoria por decisión unánime.

Ricky Hatton

El británico no había perdido en 43 combates como profesional y era un ídolo en su país cuando se acordó un combate con Mayweather. Se especuló que su incómodo estilo le daría problemas a Mayweather. Hatton subió al ring con la fama de ser un boxeador aguerrido que se disfrutaba agarrar y empujar a los contrarios, todo a lo que Mayweather le huía. No obstante, en el décimo asalto, un gancho de zurda de Mayweather llevó a Hatton de cabezas contra una esquina y fue el principio del final.

Menos de dos años después, Hatton y Pacquiao se encontrarían en esquinas opuestas. La posibilidad de una pelea repleta de acción despertó las expectativas y el filipino no defraudó. Un potente gancho de izquierda dejó al británico tendido sobre la lona en el segundo asalto.

Juan Manuel Márquez

Tal vez ninguna rivalidad se acerque a Pacquiao-Marquez. El duo protagonizó cuatro memorables combates. Los resultados: un empate, dos a favor del filipino y la última para el mexicano por nocaut. Todas fueron emocionantes y dejaron a los fanáticos con sed de más. En todas demostraron agallas, valor, valentía y un deseo de dar grandes peleas.

Después de una pausa de año y medio, Mayweather regresó para enfrentar a Márquez, quien claramente estaba fuera de su peso. Pero, la oportunidad de recibir una buena cantidad de dinero, a la vez que intentaba vencer a Mayweather no fue fácil dejar pasar. El problema fue que tanto Mayweather como Márquez hacen su mayor daño en los contragolpes y el estadounidense se aprovechó para vencer cómodamente a un mexicano más lento.