Félix ‘El Diamante’ Verdejo está a gusto con su compamento de entrenamiento en Las Vegas, en donde le están reajustando su estilo de pelea.

El sanjuanero lleva poco más de una semana trabajando a  tiempo completo con su nuevo entrenador, el cubano Ismael Salas, y se siente como un buen estudiante.

“Hay cosas que tenía que corregir. Salas es bien detallista y trata de corregir los errores que comete el peleador. Desde pequeño ha tenido la dicha de que puedo captar las cosas rápido y aplicarlas”,  indicó Verdejo, quien ya tiene 26 años, en entrevista telefónica con Primera Hora desde Las Vegas.

Verdejo está retomando su carrera bajo la dirección de Salas luego de haber concluido su etapa de 26 combates profesionales con el boricua Ricky Márquez.

La primera prueba de la combinación Verdejo-Salas sería en enero del 2020 en Nueva York. Para ese combate todavía no  le han anunciado un rival al boricua.

Salas también conversó ayer con Primera Hora y dijo que  vio en Verdejo a un peleador talentoso y joven cuando le conoció en la gira que éste hizo este año por los Estados Unidos para buscar un nuevo entrenador.

El peleador boricua recién comenzó a entrenar con su nuevo adiestrador técnico.

Producto de la escuela técnica de boxeo cubano, Salas también dijo que identificó  a un Verdejo “divorciado” de coordinación en los movimientos de piernas, caderas y hombros que desembocan en el lance del golpe.

Y decidió comenzar el campamento corrigiendo esa técnica, la que Salas dijo que el boriua perdió por las lesiones que ha sufrido en su carrera.

“En términos de béisbol, estamos trabajando la mecánica del bateo. El patrón de la técnica se había deformado y eso afecta en timing del golpe”, dijo Salas.

El veterano entrenador abundó que busca que el movimiento de las piernas, cinturas y los hombros estén alineados uno detrás del otro para que el golpe salga correctamente.

Salas dijo que Verdejo podrá mantener su pegada con la corrección de técnica que le hace, además de que será más certero con sus puños.

Y añadió que ha quedado impresionado con la rapidez con que su nuevo pupilo ha digerido el trabajo técnico.

“Me sorprendió hoy (ayer). En el trabajo desde la semana pasada a hoy estoy notando otra dinámica en los golpes. Quiere decir que estoy en buen camino”, dijo Salas.

Verdejo también dijo que ha notado la diferencia de los trabajos que ha hecho con Salas y agregó que así recuperará el brillo de diamante que tuvo al principio de su carrera.

“Estaba un poco desalineado, como dicen. Estoy arreglando el movimiento de piernas, de cintura y los golpes, buscando la puntería que tenía al principio de mi carrera”, puntualizó.

Salas añadió que la corrección de la técnica no alarga el campamento de Verdejo para su combate en enero. Anadió que “pronto”  expondrá a Verdejo a sus primeros guanteos.