El nombre de Esteban de Jesús podría acompañar a los boxeadores puertorriqueños que han sido exaltados al Salón de la Fama del Boxeo Internacional en Canastota, Nueva York.

De Jesús figura en la boleta en la categoría veteranos para la consideración de los miembros activos de la Asociación de Cronistas de Boxeo de América. Para ser elegibles, los candidatos no pueden haber peleado antes de 1943 ni después de 1988. La lista contiene 40 nombres y solamente uno será elegido.

De Jesús es conocido por las tres batallas que escenificó con el panameño Roberto “Manos de Piedra” Durán, incluyendo el pleito en el cual el boricua le arrebató el invicto al recio pegador en el 1972 en el Madison Square Garden. De Jesús tenía el talento y el potencial para ocupar un espacio entre los primeros 10 boxeadores en la historia de Puerto Rico. 

Su triunfo sobre Durán mejoró su balance a 34-1 con 18 nocauts y, además, le llevó a ser conocido en el escenario internacional. Luego en el 1974, cayó derrotado ante el panameño en la revancha y con el título ligero de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) en juego.

Cerró su carrera en el boxeo rentado con récord de 58-5 con 33 nocuats. De ser seleccionado, De Jesús estaría junto a Sixto Escobar, Edwin “Chapo” Rosario, Wilfred Benítez, Wilfredo Gómez, Carlos Ortiz, José Torres, “Cocoa Kid” Herbert Lewis, Pedro Montañez, Félix “Tito” Trinidad y Héctor “Macho” Camacho en el recinto. El árbitro Joe Cortez también fue exaltado al Salón en el 2011 como “no participante” por su legado como referí.

Triste final 

La vida de De Jesús fuera del ring no estuvo exenta de controversias. Batalló durante años con el consumo de drogas, su encarcelación por asesinato y su trágico fallecimiento.

En noviembre de 1981, durante el fin de semana de Acción de Gracias, fue convicto por el asesinato de un joven de 17 años tras una disputa de tránsito. Fue sentenciado a pasar el resto de sus días dentro de una celda. 

Dentro de la cárcel se convirtió al cristianismo y hasta se hizo en predicador. Pero también salió a la luz pública que había adquirido VIH y, eventualmente, sufrió de Sida, lo que más adelante le costó la vida. 

En el 1989, el entonces gobernador Rafael Hernández Colón le concedió una clemencia a un De Jesús ya desahuciado. El exdeportista ingresó a un hogar donde recibió el cuido necesario. Durante el tiempo en cama, recibió las visitas del cantante José “Cheo” Feliciano, el expelotero Orlando “Peruchín” Cepeda y hasta del propio Durán.

De Jesús murió el 11 de mayo de 1989 a la edad de 37 años.