El virus COVID-19 encontró la manera de colarse al círculo aledaño de Félix “Diamante” Verdejo.

El entrenador Ismael Salas contrajo el coronavirus durante un reciente viaje a Londres, Inglaterra, y ha estado estado en aislamiento desde que regresó a su hogar en Las Vegas, Nevada.

Eso significa que Verdejo alteró sutilmente la etapa final de su preparación camino al duelo contra el japonés Masayoshi Nakatani el 12 de diciembre dentro de la ‘burbuja’ del MGM Grand Hotel and Casino.

“Ahora mismo estoy entrenando en el gimnasio de Top Rank con los ayudantes de Salas haciendo el trabajo al pie de la letra siguiendo las directrices y las órdenes. El trabajo está hecho, así que lo importante sudar un poco para mantener el peso”, compartió Verdejo con este medio desde Las Vegas.

Según el púgil puertorriqueño, Salas ha seguido los protocolos de salubridad desde que regresó del viaje. El entrenador, incluso, deberá dar negativo a una prueba para detectar el coronavirus para poder entrar a la ‘burbuja’ y así acompañar a Verdejo durante la importante cita con Nakatani.

“La parte fuerte del entrenamiento y la estrategia para la pela se hizo antes de que Salas viajara. Reconozco que Nakatani no será cáscara de coco porque es aguerrido y vendrá a pelear, pero iré asalto por asalto, sin prisa porque lo importante es ganar convincentemente para que vean que estoy listo para enfrentar a la crema”, afirmó Verdejo.