Entre abucheos y sin mucha acción, Jake Paul derrota a un Mike Tyson de 58 años
El excampeón mundial no lució como aquel imponente boxeador que era en la década de los 90.
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Arlington, Texas. Los abucheos de una multitud que quería más acción crecieron nuevamente cuando Jake Paul dejó caer sus guantes antes de la campana final y se inclinó ante Mike Tyson, de 58 años.
Rendir homenaje a uno de los nombres más importantes de la historia del boxeo no hizo mucho por los fanáticos que llenaron la casa de los Dallas Cowboys de la NFL el viernes por la noche.
Paul ganó por decisión unánime sobre Tyson, ya que los golpes no estuvieron a la altura de las expectativas en una pelea entre el YouTuber, de 27 años, convertido en boxeador y el excampeón de peso pesado en su primera pelea profesional sancionada en casi 20 años.
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Todo el odio de la preparación previa a la pelea desapareció, reemplazado por abucheos de fanáticos desconcertados que esperaban más acción en una pelea que generó muchas preguntas sobre su legitimidad mucho antes de que sucediera.
La pelea no estuvo reñida según las tarjetas de los jueces, ya que uno le dio a Paul una ventaja de 80-72 y los otros dos la calificaron de 79-73.
Jake Paul praises Mike Tyson: "He's the GOAT" #PaulTyson pic.twitter.com/AhEBA5Ojoj
— Netflix (@netflix) November 16, 2024
Tyson atacó a Paul inmediatamente después de la campana inicial y conectó un par de golpes rápidos, pero no intentó mucho más durante el resto del camino.
Incluso menos rondas y rondas más cortas, junto con guantes más pesados diseñados para disminuir el poder de los golpes, no pudieron hacer mucho para generar acción.
Paul se mostró más agresivo después de la rápida ráfaga de Tyson en los primeros segundos, pero sus golpes no fueron muy eficientes. Hubo bastantes golpes descontrolados y fallidos.
Tyson se sentó y esperó a que Paul viniera a por él, con algunas excepciones. Fue un gran contraste con el evento coprincipal , otra pelea a golpes entre Katie Taylor y Amanda Serrano en la que la irlandesa mantuvo su campeonato indiscutido de peso superligero con otra decisión disputada.
Fue la primera pelea sancionada desde 2005 para Tyson, quien peleó contra Roy Jones en una exhibición mucho más entretenida en 2020. Paul comenzó a pelear hace poco más de cuatro años.
La pelea estaba programada originalmente para el 20 de julio, pero tuvo que posponerse cuando Tyson fue tratado por una úlcera de estómago después de enfermarse en un vuelo.