"El Pollo" De Jesús optó retirarse tras su último revés
Su entrenador y el expromotor del púgil se mostraron tristes al conocer sobre su muerte.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 8 años.
PUBLICIDAD
El veterano entrenador Jim Pagán llevó de la mano al fenecido boxeador Alex “el Pollo” de Jesús desde su ascenso por los distintos estratos del boxeo aficionado hasta su breve carrera en el profesionalismo, razón por la cual lo consideraba como un hijo.
Pagán se mostró sorprendido al conocer que su pupilo fue asesinado en la mañana del domingo, al tiempo que confirmó que De Jesús, quien vio acción en los Juegos Olímpicos de 2004 en Atenas, Grecia, tomó la decisión de retirarse del ensogado tras perder su último combate.
De Jesús peleó por última vez el pasado 31 de enero, contra Joseph Elegele en Florida. Perdió por nocaut.
Relacionadas
“Estuve con él desde aficionado hasta su carrera profesional y me dolió mucho porque su señora madre, que falleció hace muchos años, fuimos compañeros de clase y su familia era muy cercana a mi familia. Es una noticia dura, pues da la casualidad que anoche (sábado) Alex estuvo en mi casa compartiendo, pero me llaman esta mañana (domingo) para darme la noticia, y esto ocurrió muy cerca de mi residencia”, indicó Pagán en entrevista telefónica con este medio.
Según explicó Pagán, De Jesús tomó la decisión de retirarse del boxeo luego de su derrota ante Elegele. Finalizó su carrera con récord de 21-2 con 13 nocauts.
“Después de esa pelea él había tomado una decisión de no seguir peleando. Nos reunimos los dos, hablamos, y le dije que, de mi parte, que como él ya no tenía esa pasión por el boxeo, que se retirara para buscar otros recursos de conseguir un trabajo o que hiciera lo que a él le gustaba hacer, que era ayudar a los niños. Se le estaba buscando algo para que pudiera seguir en esa rama”, resaltó el veterano entrenador.
Pagán dijo que siempre trató de ayudar a De Jesús a lo largo de su carrera, en la que también cumplió una sentencia de cuatro años de cárcel luego de ser condenado por un incidente de violencia doméstica.
“Alex venía arrastrando con unos problemitas psicológicos y personales y, al salir a la libre comunidad, todavía estaba afectado por esos años. Al salir vuelve a lo que él sabía hacer, el boxeo, pero seguía teniendo sus problemas. Alex era medicado desde su niñez y se le ayudó en algunas áreas pero, a veces, se ponía un poco reacio a esas ayudas”, sostuvo Pagán.
“Siempre tuvo esas situaciones, y cuando esos muchachos llegan a un círculo en la vida boxística que no se quieren dedicar al deporte, en su último combate que estuvo preparándose, ya Alex no tenía ese amor y pasión para seguir boxeando. Ahí decidí aconsejarlo para que se retirara y no siguiera cogiendo golpes que podrían hacerle daño”, añadió Pagán.
Para Pagán, la muerte de De Jesús fue como si hubiera perdido a un hijo. El púgil vivía en el Residencial Manuel A. Pérez, en donde se crió.
“Somos más de lo que la gente piensa a veces; somos, quizás, más padre e hijo porque pasamos mucho tiempo con ellos y, a veces, en sus vidas diarias cometen ciertos errores que, quizás, sus familias no pueden controlar, y entonces nosotros tenemos que hacer ese rol de ser consejeros y buscarles la manera de llevar una vida normal. Y hay veces que no podemos lograr eso, pues están tres o cuatro horas con nosotros en el gimnasio, pero después que salen no podemos estar con ellos. Y Alex, en ese aspecto, a veces era un poquito incontrolable en cuanto a tenerlo en un sitio y que se mantuviera ahí”, dijo Pagán.
“Esto ha sido una situación que no esperábamos, y máximo él, que era bien querido en su comunidad. Las personas lo querían mucho y todas las personas mayores siempre lo estaban aconsejando. Las personas en la comunidad donde se crio siempre estuvieron atentos a él para que no se ‘saliera de la línea’ de una vida normal, pero estamos sentidos por esta noticia”, añadió Pagán.
Adolorido su primer promotor
Por su parte, el promotor Peter Rivera, quien firmó a De Jesús en el 2004 a la empresa PR Best Boxing, se mostró adolorido y sorprendido al conocer sobre el deceso del púgil.
“Nos sentimos tristes al enterarnos sobre su muerte esta mañana (del domingo). Esta historia no terminó bien para un atleta que tuvo muchas oportunidades en su vida y que le trajo momentos de gloria a Puerto Rico. Por lo que he leído estos últimos años no fueron fáciles para él, y nosotros, que lo firmamos en el 2004 junto con (Juan Manuel) Juanma (López), (José) Correa y (Carlos) Valcárcel, tratamos, por muchos años, de encaminarlo y que aprovechara sus oportunidades. Pero, lamentablemente, en el camino se buscó unos problemas y, como saben, terminó en la cárcel y su carrera se detuvo; fue un poco difícil volver a retomarla”, indicó Rivera.