Amanda Serrano: Una mujer normal
Pese a sus cetros mundiales en cinco divisiones en un deporte dominado por hombres, la boxeadora dice que su estilo de vida no ha cambiado
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 8 años.
PUBLICIDAD
Amanda Serrano no es la típica chica con una ocupación habitual. La joven escogió seguir una carrera en el boxeo rentado, un deporte controlado por figuras masculinas.
A pesar de contar con atributos físicos y carisma, Serrano prefiere que sean las habilidades dentro del ring las que hablen por ella.
Serrano (32-1-1, 24 KO) ha conquistado cetros mundiales en cinco divisiones y el próximo 21 de julio arriesgará la faja súper gallo de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) ante Edina Kiss (13-4) durante una cartelera que tendrá como escenario el Sheraton Hotel and Casino.
Durante una extensa conversación con Primera Hora, la joven de 28 años compartió sus impresiones sobre los obstáculos y las ventajas que ha experimentado como boxeadora.
“Es difícil estar en un deporte dominado por los hombres, pero una y otra vez he demostrado que soy una buena peleadora. Ayuda que, comparada con otras mujeres en el deporte, soy un poco atractiva. Todos tienen sus opiniones, pero me considero bonita”.
“Ser bonita ayuda para conseguir auspiciadores, recibimos invitaciones para estar en televisión. En un momento dado tuvimos a Mia St. John que no fue una gran boxeadora, pero es una mujer hermosa. Estuvo en la portada de (la revista) Playboy y eso le ayudó mucho. Todavía está produciendo mucho dinero. Fue una campeona, pero no llegó a un nivel elite. También estuvo Laila Alí, quien es parte de la campaña de productos de belleza y su apariencia le ayudó mucho. Todo lo que nos ayude a abrir las puertas, vamos a hacerlo”.
¿Te incomoda que tal vez se fijan más en tu belleza que en las habilidades dentro del ring?
“No me molesta porque pienso que soy una mejor boxeadora que guapa. He demostrado tanto a los fanáticos como a los críticos que puedo pelear. No entro al ring para ser una boxeadora linda. No me importa sudar o sangrar. Una vez gano mis peleas me preocupo por verme bien”.
Eres una campeona mundial que disfruta de reconocimiento. ¿Te ves como una mujer normal?
“Sí. Cuando estoy en las noticias y camino por el barrio en Brooklyn, la gente se detiene para mirar o a tomar una foto. Se siente raro, pero a la misma vez bien. Camino por las calles como si fuera una más. Comparto con mi familia como cualquier persona y todavía me siento así. Cuando leo las entrevistas o me veo en las noticias no deja de asombrar lo que podido lograr en el deporte. Todavía no he golpeado todo lo que he podido hacer, particularmente saber que posiblemente soy uno de las mejores peleadoras que ha salido de Puerto Rico. Aunque hay personas que reconocen lo que he podido hacer en el boxeo, todavía soy la misma chica de Brooklyn. No siento que sea algo especial”.
¿Haces las mismas cosas que cualquier persona?
“Claro. Voy a las tiendas buscando los especiales como todo el mundo. Mi estilo de vida no ha cambiado. Sí soy una boxeadora exitosa, pero no me pagan al nivel de un Floyd Mayweather u otros boxeadores que no salen de la casas por temor que los asalten. No hago la cantidad de dinero que me permite cambiar mi estilo de vida. Tampoco voy a negar que he recibidos algunos beneficios como, por ejemplo, voy a mi pizzería favorita y me dan la comida gratis. He ido a tiendas y me dan cosas gratis, me llaman campeona y a veces es divertido, pero no me gusta aprovecharme. Siento que soy una chica común que debe trabajar para obtener las cosas”.
¿Cuál es tu pizza favorita?
“Oh, siciliana. Me encanta el pan”.
¿Te gusta arreglarte cuando sales?
“No tengo amistades, pero cuando voy a las carteleras, me encanta vestir bien aunque no fluyo tanto. Personas me han dicho que debo ser un poco más femenina, pero lo soy a mi manera. Me gusta vestir bien, ir al salón de belleza para peinarme, pero cuando voy al gimnasio no me importa cómo me veo”.
¿Qué haces durante tu tiempo libre?
“Nada. Soy una muchacha bastante aburrida. Me gusta ir al cine con la familia, ir de compras. Me encanta comprar cosas nuevas, ropas, zapatillas, pero la mayoría del tiempo estoy en el gimnasio siete días a la semana. Me encanta ir al gimnasio. Voy mucho con mi familia, tratamos de ver todas las películas, incluyendo las aburridas. No me gustan las de acción”.
¿El boxeo es tu vida?
“He estado en el boxeo desde los 12 años cuando mi hermana (Cindy) comenzó. Mi primer trabajo fue en un gimnasio como niñera, saltamos de gimnasio en gimnasio y trabajé como en cuatro. No sé qué hubiese sido de mi vida sin el boxeo. Honestamente, no sabría decir si me salvó, pero me colocó en el camino correcto de mi futuro. Ahora puedo venir a Puerto Rico y la gente me reconoce cuando camino por las calles. Si no fuera por el boxeo no sé dónde estaría. Todo se lo debo a mi hermana y a Jordan Maldonado (manejador y entrenador)”.
¿Se ha convertido en una tradición pelear en Puerto Rico?
“Espero que sí. No importa si es en Puerto Rico o en Brooklyn, es como estar en casa. Tengo mis fanáticos en Nueva York y también en Puerto Rico. Los de aquí con un poco más auténticos. En Brooklyn tengo que vender los boletos de las carteleras, pero acá anuncian que estaré peleando en el lugar está lleno en su totalidad. Es una gran sensación”.
Serrano tiene en agenda sumar la corona de una sexta división antes de probar suerte en las artes marciales mixtas, pero mientras tanto, se disfruta el máximo la etapa que está viviendo.