Bernie Williams Figueroa pospuso recibir una de las más sagradas distinciones que cualquier pelotero de los Yankees de Nueva York pueda recibir.

Durante años, la organización estuvo detrás del ex jardinero central de los Yankees para que firmara un contrato de liga menor de un día para hacer formal su retiro, pero Williams siempre encontraba un pretexto para no hacerlo. Sin embargo, Williams eventualmente cedió y esta noche su número 51 fue oficial retirado.

Ahora le hace compañía a otros ilustres Yankees.

Durante 16 temporadas, Williams no solamente le hizo honor a las franelas de la franquicia, también las de   su patria.

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“Nunca en mis sueños imaginé que un delgado joven de 17 años de Puerto Rico estaría aquí en esta celebración. Me siento abrumado. No habían muchas cosas que podía hacer en preparación para esta momento”, dijo Williams.

También estuvo presente en Yankee Stadium su madre Rifuna Figueroa Concepción, su hermano Hiram Williams, y sus hijos.

Williams fue una pieza clave para que los Yankees ganaran cuatro trofeos de Serie Mundial durante la década de 1990. Asimismo, ganó cuatro Guantes de Oro y estuvo presente en cinco Juego de Estrellas.

“(Joe) Torre una vez me dijo que Dios no da la habilidad, sino que permite que uno la tome prestada. Agradezco por haber permitido tomar prestada las habilidades para así convertirme en un Yankee y jugar para esta gran franquicia por tantos años”, destacó Williams, quien terminó con 2,335 hits.

Como parte de la ceremonia, Williams develó la placa con el 51 y, a su vez, le fue presentada la placa que acompaña a otros como Babe Ruth, Joe DiMaggio, Lou Gehrig y Yogie Berra, entre otros, que ya adorman el mural de los Yankees más distinguidos.

Williams no dejó pasar la oportunidad para agradecer al público que durante 16 temporadas lo vio lucir el legendario uniforme. 

“A todos los puertorriqueños que están aquí, mi saludo de corazón”, dijo en español.

“Hay tantas memorias que sería unjusto escoger mi favorito, pero en cada una, los fanáticos fueron parte. Gracias por apoyarme durante y después de mi carrera en el béisbol. Me recibieron como un hijo, así que gracias por el apoyo”, concluyó.