El boricua de los Cardinals de San Luis, Yadier Molina se convirtió este martes en el receptor con más oouts propinados en la historia de las Grandes Ligas.

La historia la consiguió al atrapar un bombo de foul por la línea de primera base del bateador de los Pirates, Ke’Bryant Hayes. Fue el out 14,865 de su carrera, con los que sobrepasa al vegabajeño y miembro del Salón de la Fama, Iván Rodríguez.

Rodríguez alcanzó su cifra en 21 temporadas. Fue electo al Salón de la Fama en su primera oportunidad en la papeleta. Molina está en su decimonovena temporada y se toda referencia sobre él va enfocada en que será un futuro miembro del Salón de la Fama en Cooperstown.

Los outs propinados por un catcher incluyen los ponches que recibe en su función defensiva, excepto cuando el tercer strike no es retenido y surge en una movida fuera de control y el receptor debe tirar la pelota hacia la primera para completar el out, ilustró el experto en estadísticas de béisbol, Jun Juarbe. Ese ponche se le acredita al lanzador, mientras que al catcher se le anota una asistencia de home a primera, agregó Juarbe.

La estadística no incluye outs que ha dado el receptor en otras posiciones, como el ponchete que se anotó Molina como lanzador la semana pasada.

La lista de los 20 receptores con más outs propinados en las Grandes Ligas incluye también Benito Santiago y Jorge Posada. Santiago ocupa el decimotercer puesto con 10,816 y Posada el decimosexto con 10,016.

El récord es el más reciente de una serie de marcas que ha establecido Molina en su carrera. En el 2018, por ejemplo, recibió su partido número 1,757 para quebrar la marca del ‘hall of famer’ Gabby Hartnett, con los Cubs de Chicago, como el catcher con más juegos recibidos para un mismo equipo. Hartnett lo hizo durante una carrera de 20 años entre el 1922 y 1941. Desde entonces Molina ha seguido quebrando su propia marca y con el juego de hoy ya suma 2,144 partidos recibidos con los Cardinals.