Víctor Caratini se codea con la crema de los catchers boricuas en Grandes Ligas
Empató con Iván Rodríguez, miembro del Salón de la Fama, como los únicos receptores boricuas en intervenir en dos juegos sin hits ni carreras.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 3 años.
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El receptor coameño Víctor Caratini se sumó el viernes en la noche a la exclusiva lista de ocho receptores del patio que han participado en un juego sin hits en el béisbol de Grandes Ligas, pero su logro más reciente lo coloca en un club mucho más cerrado entre los puertorriqueños, y como el primer cátcher en toda la historia de las Mayores en conseguir un acontecimiento único.
Caratini, que le recibió el juego completo al lanzador derecho y autor del no-hitter de anoche, Joe Musgrove, se convirtió en apenas el segundo catcher boricua con dos partidos de este tipo, igualando al miembro del Salón de la Fama, Iván “Pudge” Rodríguez.
Y aunque el mérito mayor en un juego sin hits es, naturalmente, para el pitcher, como receptor Caratini marcó otros importantes hitos el viernes.
Es el primer receptor titular en la historia de Major League Baseball (MLB) en trabajar partidos sin hits consecutivos para diferentes equipos, según el Elias Sports Bureau. Se han registrado otras 10 instancias en los que un receptor titular ha recibido ‘no-hitters’ seguidos, pero en todas fueron para sus mismos equipos.
El último juego sin hits que se había registrado en Grandes Ligas, antes del viernes, fue el del 13 de septiembre de 2020, cuando el propio Caratini le recibió en uniforme de los Cubs de Chicago al también derecho Alec Mills.
Todavía no tiene una temporada completa
Caratini, quien debutó en las Mayores en 2017, solo tiene 27 años. Y en las cuatro campañas previas con los Cubs, nunca tuvo una temporada completa, pues siempre actuó como reserva en sustitución del venezolano Wilson Contreras.
En la temporada en que más juegos tuvo, en 2019, participó en 95 encuentros pero comenzó detrás del plato en solo 59.
Así que la gesta de recibir dos ‘no-hitters’ consecutivos cobra mayor relevancia por el hecho de que siempre ha compartido la receptoría, lo que significa que en muchas menos oportunidades consiguió lo que otros catchers han logrado en muchos más partidos detrás del ‘home’.
Entre la temporada acortada de 2020 (por la pandemia) y lo que va de esta, Caratini ha comenzado como receptor en la alineación de un partido en solo 26 ocasiones. Pero para ser más preciso, entre su primer ‘no-hitter’ el pasado 13 de septiembre y el de este viernes, solo ha abierto como catcher titular en 11 encuentros (seis con los Cubs y cinco con los Padres).
Mills, el autor del no-hitter del año pasado, ponchó a cinco en las nueve entradas y regaló tres bases por bolas. Y al tiempo que maniató la ofensiva de Milwaukee, Chicago atacó para 10 hits, ganando el partido 12-0 sobre los Brewers. En ese partido Caratini aportó en grande también en la ofensiva, al batear de 4-2 con un doble, dos carreras anotadas y tres remolcadas.
Entretanto el viernes, Musgrove consiguió su segunda victoria de la temporada al tirar el juego completo, ponchar a 10 y no dar boletos. El único corredor que se le embasó, Joey Gallo, fue porque el derecho le pegó un pelotazo en la cuarta entrada.
En su primera apertura de la campaña, también con el boricua Caratini detrás del plato, Musgrove tiró seis entradas completas sin conceder anotaciones y solo permitió tres hits. Suma 15 entradas sin permitir carreras para efectividad perfecta de 0.00 con 18 ponchados.
Por su lado Caratini, además de recibirle los lanzamientos a Musgrove, bateó de 3-1 en un partido de mucha menos ofensiva que terminó con el triunfo de San Diego vía blanqueada 3-0 sobre los Rangers de Texas.
Los Padres juegan ahora para récord de 5-3. Caratini está promediando .313 en bateo, con un cuadrangular y siete carreras remolcadas en solo cinco partidos.
Los ocho receptores puertorriqueños
Ocho receptores boricuas han recibido al menos un juego sin hits en un total 10 ocasiones según información recopilada por el historiador deportivo Jossie Alvarado. El miembro del Salón de la Fama, Iván Rodríguez (1994, 2007), y Caratini (2020, 2021) son los únicos en lograrlo dos veces. Los otros seis fueron Eliseo Rodríguez (1975), Javier López (1994), Jorge Posada (1998), Geovany Soto (2008), Ramón Castro (2009), y Martín Maldonado (2019).
De esos, Eliseo fue el primero al lograrlo en 1975 como compañero de batería del hoy miembro del Salón de la Fama, Nolan Ryan, quien de paso es el lanzador con más juegos sin hits en la historia (7).
La única vez que dos receptores boricuas han recibido un juego sin hits el mismo año fue en la temporada de 1994. López lo hizo primero con Kent Mercker el 8 de abril, e Iván le siguió el 28 de julio con una joya de Kenny Rogers, que además fue el decimocuarto juego perfecto de la historia de Grandes Ligas. Iván, Jorge Posada y Ramón Castro son los únicos receptores boricuas en haber recibido un perfecto.
De otro lado, los lanzadores puertorriqueños o de ascendencia boricua con un juego sin hits han sido cuatro hasta ahora. El primero fue John Candelaria, quien lo logró en el uniforme de los Pirates de Pittsburgh en 1976. El segundo en conseguirlo, y primero desarrollado en la isla fue Juanchi Nieves, lanzando para los Brewers de Milwaukee en 1987. Jonathan Sánchez le siguió en 2009 con los Giants de San Francisco, mientras Jake Arrieta logró lo mismo con los Cubs de Chicago en 2015.
Para los Padres, el juego sin hits del viernes fue el primero en la historia de la franquicia.