Por cinco temporadas consecutivas, los Criollos de Caguas han estado en la serie final de la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente.

Lograron campeonatos en el 2011 y el 2013, y ahora tienen la posibilidad de agregar otro trofeo a la colección durante la final disputan por tercer año al hilo ante los Indios de Mayagüez.

¿Cómo lo han logrado? Pues la fórmula no se distingue de otras franquicias ganadoras, sino que se repite: un dueño con ánimos de invertir, un núcleo de jugadores talentosos que se mantiene junto por varios años y desarrollan gran química, y una gerencia activa que redondea el equipo con importados de calidad.

“Sencillamente, el dueño Raúl Rodríguez merece mucho crédito, pues las cosas que él hace son increíbles. No escatima. Lo hizo cuando yo era jugador y lo sigue haciendo ahora que soy gerente general. Todo el crédito es para él”, dijo el gerente general Alex Cora, quien lleva los últimos dos años en ese puesto y estuvo en tres de las últimas cinco finales como jugador.

“Además, el grupo nativo es muy bueno. Necesitas los importados, pero dependes de tus nativos. El núcleo de nosotros ha sido el mejor en la liga en los últimos cinco años”.

Pero no solo el talento es indispensable, sino también la química y el deseo de ganar, algo que es palpable en la novena cagüeña.

“Este equipo es de mucho carácter y eso se logra a través de los años. Una vez lo dijo John Wooden: ‘para ganar hace falta talento, pero para repetir hace falta carácter’”, dijo Cora.

“Hasta los importados son parte del núcleo ganador, pues este año repetimos a cinco de ellos. Jugadores como Michael Nix, Fernando Hernández, Derek Blackshear y Eddy Ramos vuelven con nosotros porque conocen el grupo y porque ellos mismos llamaron que querían regresar. Así es este grupo”.