Cuando Francisco Lindor abrió la novena entrada en el American Family Field, de Milwaukee, los Mets de Nueva York estaban a tres outs de ser eliminados de la postemporada de las Grandes Ligas.

El panorama no era alentador. Los Brewers tenían una ventaja de 2-0 y Lindor había conectado los únicos dos hits de los Mets en todo el partido.

Con la temporada en juego, Lindor consiguió una base por bolas en ocho lanzamientos del estelar taponero Devin Williams.

Luego de un ponche de Mark Vientos, Brandon Nimmo conectó un sencillo al jardín centro derecho, que colocó corredores en las esquinas.

Lo que sucedió después quedará grabado en la memoria de los fanáticos de los Mets.

Le tocó el turno a Pete Alonso, quien hasta ese entonces había bateado de 11-1 en la serie de comodines. Como si fuera poco, también pudo haber sido su última vez en la caja de bateo con el uniforme de Nueva York, ya que está próximo a convertirse en agente libre. Sin embargo, cuando las millas más contaban apareció el “Oso Polar” con un cuadrangular de tres carreras al bosque derecho que puso arriba a los Mets, 3-2.

Poco después, Starling Marte pegó un hit impulsor que extendió la ventaja a 4-2. En la parte baja de la novena, los Brewers intentaron reaccionar, pero Lindor selló el triunfo con un espectacular double play. Fue así como los Mets completaron una dramática remontada en el tercer juego de la serie de comodines para avanzar a la Serie Divisional por primera vez desde el 2015.

En medio de la euforia, Lindor levantó con un abrazo al dueño de los Mets, Steve Cohen, y hasta a la esposa del empresario, Alexandra Cohen. De hecho, con la locura que se había desatado en el terreno no pudo ni expresarse en una entrevista televisiva con SportsCenter debido a que se tenía que tomar la foto con el equipo.

“Si miran para allá, me tengo que tomar la foto con el equipo. Me tengo que ir, pero los amo. Mets Nation, lo hicimos. Los amo”, dijo el campocorto puertorriqueño entre risas.

No fue hasta minutos después de destapar varias botellas de champán en el clubhouse visitante del American Family Field que Lindor pudo compartir lo que sentía en ese momento.

“Lo hicimos. Lo hicimos. Fuimos capaces de mirarnos a los ojos y decirnos: ‘Vamos, vamos a seguir escalando y enfocarnos en la siguiente tarea para terminar el trabajo’. Ahora tenemos que disfrutar esta victoria e ir a la próxima serie para hacer esto de nuevo”, comentó Lindor al medio neoyorquino SNY.

Lindor concluyó el partido con dos imparables, una base por bola y una carrera anotada en tres turnos al bate. Sin embargo, su último turno fue el más importante para los Mets, aunque no le pegó a la pelota.

“Sabía que no tenía que forzarlo. Tenía que esperar por un buen lanzamiento y pegarle. Si no recibía un buen lanzamiento, debía dejar que me dieran la base por bolas y permitir a (Mark) Vientos, (Brandon) Nimmo, Pete (Alonso) y (José) Iglesias hacer lo que ellos mejor hacen”

“Nos habíamos enfrentado ya dos veces y era cuestión de que tuviéramos turnos de calidad”, agregó.

Por su parte, el mánager de los Mets, el venezolano Carlos Mendoza, afirmó que el tercer encuentro de la serie de wild card contra los Brewers fue un ejemplo de lo que ha sido esta temporada para Nueva York.

“Esta es la historia de nuestra temporada. Todo el año nos han tumbado, pero siempre encontramos una manera de levantarnos. Así sea después de una derrota y al día siguiente encontrar la forma de ganar. Eso pasó anoche (miércoles). De hecho, pasó hoy también en el séptimo inning después de los dos jonrones de Milwaukee”, indicó Mendoza, quien está en su primera campaña al frente de la novena de Queens.

“Pero en este dugout hay ese sentimiento de creer en nosotros. Mientras veo desarrollarse toda esta situación, vamos a la novena y veo a Lindor y miré quién estaba en turno y era Pete. Pensé que este era el momento. Sé que si tenemos a corredores en base, Pete nos puede cargar en octubre y esperamos que este sea el caso”, abundó.

Los Mets abrirán mañana, sábado, la Serie Divisional de la Nacional contra los Phillies de Filadelfia, campeones del Este, en el Citizens Bank Park. El japonés Kodai Senga, quien apenas ha lanzado en cinco entradas esta temporada, será el abridor de Nueva York.