Nueva York. Las negociaciones para poner fin a la paralización laboral en las Grandes Ligas no registran avances tras una contenciosa reunión que duró casi 90 minutos.

Los jugadores presentaron una propuesta con dos cambios: reducir el plan para destinar el fondo de reserva para pagarle a los jugadores que no son elegibles al arbitraje salarial, de 105 a 100 millones de dólares, y recortar el número de peloteros afectados por la manipulación del tiempo de servicio.

Los dueños responderán al sindicato, posiblemente esta semana. Pero resulta evidente que será muy complicado que los entrenamientos de primavera inicien a tiempo, el 16 de febrero.

En una señal del estancamiento, la Asociación de Jugadores ha comenzado a distribuir a los peloteros el dinero de un fondo reservado para el paro patronal.

El primer día de la temporada está programado para el 31 de marzo y tendrían que llegar a un acuerdo a finales de febrero o principios de marzo para comenzar a tiempo. Esto le daría tiempo a los jugadores de cumplir con los protocolos de COVID-19 y tres semanas de entrenamiento y duelos de exhibición.