Por décadas, el conjunto de parques de béisbol de las distintas secciones de Levittown han sido un semillero de atletas no solamente del béisbol, aunque allí en algún momento jugaron figuras como Javier Báez, Francisco Lindor y José Berríos.

Pero después del huracán María, las tres facilidades más grandes, los parques de la primera segunda y tercera sección de Levittown, fueron arrasadas, por lo que un grupo de amigos y residentes quiere devolverla al estado anterior, y para eso buscan voluntarios, auspiciadores o personas que simplemente donen un poquito de su tiempo a la causa.

Según informó el presidente de la Asociación de Béisbol de Levittown (ABL), Rafael ‘Cocolito’ Rivera, este sábado 29 de abril se reunirán desde las 8:00 a.m. para trabajar con el parque de la primera sección, y toda persona que desee ayudar es bienvenida.

“Reparar esos parques es un sueño de un grupo de amistades que jugamos allí y que vivimos en esta zona”, dijo Rivera, quien informó que los parques son administrados por el municipio autónomo de Toa Baja, pero la ABL le hizo una petición a la administración del alcalde Bernardo ‘Betito’ Márquez para poder participar en los procesos de rehabilitación y reacondicionamiento.

En Levittown, que cuenta con siete secciones, existen seis parques, explicó Rivera, y todos fueron afectados de una manera u otra por el paso del devastador ciclón. La ABL se concentra ahora en los tres más grandes, que son los de la primera, segunda y tercera sección, dijo.

“Aquí todo quedó devastado y lo estamos trabajando junto con el gobierno municipal. Quitamos todo lo que molestaba y ahora estamos poniendo verjas, pintando, luego se trabajará el terreno de juego, pero todo es paulatino… según lleguen los auspiciadores”, dijo Rivera.

“Estamos en la etapa de limpieza de áreas y empezamos a pintar bleachers. Ya los lavamos y pusimos ‘primer’ a uno de los edificios. Estamos esperando instrucciones del gobierno y viene un arquitecto. Es una alianza de la comunidad, que alzó la voz y quiso trabajar por su cuenta”, agregó.

“La ABL es una organización sin fines de lucro y un grupo de gente que decidió meter mano porque vivimos aquí y queremos echar esto hacia adelante”, afirmó Rivera.

Si desea auspiciar o colaborar como voluntario, se puede comunicar con Rafael Rivera al (939) 250-9890, con Ramón O’Neill (787) 586-4616; con Johnny Rodríguez (787) 467-0642; con Elvin Rodríguez (787) 462-7723; o con Martín Vaello (787) 649-3215.