Salida de orientales lleva a los Gigantes de Carolina a modificar su fórmula
La partida de los jugadores importados japoneses provocan cambios para mantenerse en la pelea por la clasificación.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 2 años.
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En medio de una temporada exitosa, en la que han acechado al puntero de la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente (LBPRC), la fórmula de los Gigantes de Carolina podría cambiar en los próximos días con la salida de los importados provenientes de Japón.
Como sucede cada temporada con los orientales, las organizaciones del béisbol nipón envían a sus jugadores con una fecha de regreso establecida en casos desde su llegada, y esta usualmente es unos días antes de Navidad. Carolina contaba con cuatro jugadores.
Y la química del equipo podría transformarse al cambiar componentes del equipo. Para bien, espera la administración.
Hasta los partidos del sábado, los Gigantes marchaban terceros con 21-16, muy cerca del segundo puesto de los Cangrejeros (22-16).
“Como nosotros sabíamos que los japoneses se iban, trajimos tres lanzadores y un jugador de posición”, dijo el administrador de los Gigantes, Javier Hernández.
“(Shunsuke) Kasaya, desde el principio, nos había dicho que su esposa estaba embarazada y que pronto daría a luz, por lo que se tenía que marchar. Y luego se marchó el estadounidense que juega en Japón, Carter Stewart”.
Kasaya fue inactivado el 4 de diciembre, pero el tiempo que estuvo fue uno de los mejores lanzadores de la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente. El zurdo acumuló marca de 3-1 con ERA de 1.00 con 28 ponchetes en 27 entradas de labor a lo largo de cinco salidas.
Stewart, por su parte, tenía permiso para solamente cuatro salidas y las realizó. Este vino en una misión de rehabilitación y la novena japonesa lo mandó a parar tras cumplir con su asignación debido a que este año su contrato japonés es elegible para que cualquier equipo de Estados Unidos lo compre, explicó Hernández.
“También sabíamos que el infielder Richard Sunagawa se marchaba porque no le fue bien”, dijo Hernández sobre el jugador que, en 15 turnos, solo pudo conectar cuatro hits y acumuló promedio de .098.
“Así que por él trajimos al taiwanés Tsung-Che Cheng, que es un siore de Clase A fuerte con Pittsburgh. Él jugó en la Serie del Caribe el año pasado con Colombia y es de los mejores prospectos de los Pirates. Vino para sustituir a Sunagawa”, dijo el administrador.
Por Kasaya entró el dominicano Eduardo Rivera, que ya ha realizado tres salidas. Y por Stewart llegó el venezolano José Fuentes, quien también tiene tres partidos iniciados.
El otro japonés, Sota Tanoue, se queda hasta el 22 de diciembre junto a Sunagawa, por lo que le queda al menos una salida más. Pero según Hernández, el equipo negocia con dos brazos adicionales. Aunque no reveló nombres, uno de ellos tiene experiencia de grandes ligas y el otro estuvo en AAA esta temporada. El primero podría ejercer funciones de ‘setup man’ o cerrador.
En general, Hernández dijo sentirse complacido por la campaña que han tenido hasta ahora los Gigantes, que están a tres juegos de diferencia de los Criollos (24-13), que han ocupado el tope toda la temporada.
“Tenemos la suerte de que Freddie Cabrera, que estaba representando a Puerto Rico, ya se nos unió. Por lo que en la rotación nos quedamos con Fuentes, Rivera, Héctor Santiago, Freddie Cabrera y uno de los estadounidenses que vienen va a abrir. Tendríamos tres derechos y dos zurdos”, dijo.
“Los bates están despertando, con Brian Navarreto, Jonathan Rodríguez y Adeiny Hechavarría, que es grandes ligas. Estamos buscando un pelotero adicional, un zurdo que pueda jugar en los bosques y salga del banco. Ahora mismo tenemos cuatro nada más en el OF: Jan Hernández, Aldemar Burgos, Bryan Torres y Rodríguez”, agregó.
En la receptoría, dos de los tres catchers han jugado en las Mayores: Navarreto y Mario Feliciano.
“Estoy supercontento porque todas las negociaciones que nos sentamos a hacer desde el principio han rendido frutos. El pitcheo nos ha cargado. Tenemos buenos abridores y buenos relevistas, pero algunos de ellos eran abridores el año pasado y si los necesitamos, podemos ponerlos a abrir”, evaluó Hernández.
“Veo un equipo que tiene mucho ‘chance’ de ganar. La meta corta es clasificar y la larga, tratar de llegar a todo lo que deseamos. Pero vamos paso a paso”, concluyó Hernández.