Seattle. Hace un año, los Yankees de Nueva York quedaron fuera de la contienda por los playoffs cuando restaba una semana de la temporada regular. Vieron cortada así una racha de seis apariciones consecutivas en la postemporada.

Al recordar aquella sensación, los Yankees encontraron incluso más dulce la clasificación asegurada el miércoles, otra vez a una semana de que concluya la campaña.

“Muchas cosas se han combinado. Probablemente, hemos tenido mejor salud en general”, dijo el manager Aaron Boone. “Definitivamente ha habido una mayor concentración de los chicos que venían de años duros. En términos simples, somos mejores. No éramos un gran equipo el año pasado, y en éste el equipo tiene la oportunidad de hacer algo especial”.

Luego de pasar el año pasado sentados en casa cuando llegó la postemporada, los Yankees obtuvieron su sitio esta vez, al superar el miércoles 2-1 a los Mariners de Seattle en 10 innings.

Anthony Rizzo conectó un doble que rompió el empate en la décima entrada y empujó las dos carreras de Nueva York.

Rizzo bateó un lineazo ante el primer lanzamiento del inning por parte del relevista Collin Snider (3-4), por la raya del jardín derecho, para empujar desde la intermedia al dominicano Jasson Domínguez, corredor automático.

Se trata de la 59na vez que la franquicia participará en la postemporada. Realizará su 25to viaje a la postemporada en los últimos 30 años.

Los Yankees, que tienen asegurado al menos el pasaje de comodín en la Liga Americana, han avanzado a los playoffs seis veces en las siete temporadas de Aaron Boone como manager.

Nueva York, el primer equipo que ha asegurado su presencia en la postemporada este año en la Liga Americana, amplió a cinco juegos su ventaja frente a Baltimore, que es segundo de la División Este, cuando restan 10 duelos.

Los Yankees lograron sólo dos hits ante el abridor Bryce Miller, pero anotaron dos carreras producidas por Rizzo, quien les dio la ventaja temprana con un sencillo en el segundo acto, para su primera remolcada desde el 2 de septiembre.

Ian Hamilton resolvió el décimo episodio para acreditarse el tercer salvamento en su carrera y su primero de este año. Luke Weaver (6-3) abanicó a cuatro en un inning y un tercio sin aceptar imparable, para llevarse el triunfo.

Por los Yankees, el venezolano Gleyber Torres de 5-0. Los dominicanos Juan Soto de 2-1, Domínguez de 3-0 con dos anotadas. El mexicano Alex Verdugo de 4-0.

Por los Mariners, los dominicanos Julio Rodríguez de 4-0, Jorge Polanco de 4-0. El mexicano Randy Arozarena de 4-0.

Los Brewers también descolcharon el champán

Milwaukee. Los Brewers se han acostumbrado a sellar pasajes de playoffs. Pero esta celebración fue diferente a las demás, porque era inesperada.

“Es como si nadie hubiera pensado que íbamos a estar aquí hoy”, reconoció el campocorto dominicano Willy Adames el miércoles, luego que Milwaukee ganó su tercer título de la División Central de la Liga Nacional en cuatro años. “Ahora estamos aquí y no sé qué van a decir todos después de esto”.

Milwaukee se convirtió en el primer equipo de las Grandes Ligas en asegurar el campeonato divisional Los Cachorros de Chicago cayeron en casa 5-3 ante los Athletics de Oakland, perdiendo la oportunidad de alcanzar a los Cerveceros en la división.

El clubhouse de los Cerveceros se vació de peloteros cuando faltaba un out del noveno inning en Chicago, un par de horas antes del primer lanzamiento programado de Milwaukee contra Filadelfia. Se escuchó una ovación algo apagada después de ese último out, cuando los Cerveceros se aseguraron, como espectadores en la TV, de hilar títulos divisionales, algo que no conseguían desde 1981-82.

Esto marca la sexta aparición de los Cerveceros en la postemporada en los últimos siete años, un logro destacable para un equipo que solamente pasó a los playoffs un par de veces en un periodo de 35 campañas entre 1983 y 2017. Pero este camino a los playoffs ha sido un poco diferente al resto.

Más tarde, la fiesta comenzó en serio. Jake Bauers bateó un sencillo productor que dio a Milwaukee la victoria por 2-1 sobre los Filis. Cayeron serpentinas azules y amarillas en el graderío del American Family Field, mientras los peloteros se reunían en el jardín central.

Hubo luego champaña en el vestuario. De ahí, los Cerveceros volvieron al campo y posaron para una foto grupal, mientras eran ovacionados por el público que permaneció en el graderío.

No todos podían beber. El venezolano Jackson Chourio, novato venezolano, tiene apenas 20 años y es menor de edad según las leyes de Estados Unidos.

“Pienso que quizá tomaré una Coca o algo”, dijo entre risas.

Aunque los Cerveceros se han acostumbrado a superar las expectativas que hay sobre ellos antes de cada campaña, las probabilidades estaban en su contra más de lo habitual este año.

Craig Counsell, el mánager con más triunfos en la historia de los Cerveceros, partió a los Cachorros. Corbin Burnes, el ganador del Premio Cy Young de 2021 en la Nacional, fue canjeado a los Orioles de Baltimore.

El diestro Brandon Woodruff, dos veces elegido al Juego de Estrellas, no lanzó para nada en todo el año, mientras se recupera de una cirugía en el hombro y el dos veces relevista del año Devin Williams se perdió la primera mitad de la temporada debido a una fractura por estrés en la espalda. El jardinero estrella Christian Yelich y los lanzadores Wade Miley y Robert Gasser sufrieron lesiones que terminaron de forma prematura sus temporadas.

Nada de ello importó.

Los Cerveceros se hicieron con el primer puesto a finales de abril y nunca miraron atrás. Cumplieron con los comentarios que Yelich hizo en los entrenamientos de primavera en medio de especulaciones de que Milwaukee daría un paso atrás sin Counsell.

“Incluso cuando hemos sido buenos estos últimos años, nadie nos elige como buenos sólo porque somos los Cerveceros”, dijo Yelich en ese momento. “Es lo que es. Pero creo que tenemos la oportunidad de sorprender realmente a algunas personas con el talento que hay en esta sala”.

Eso es exactamente lo que hicieron.