El lanzador cubano de los finalistas Gigantes de Carolina, Miguel Romero, es el último de los 14 cubanos que estuvieron activos en la temporada 2022-23 de la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente (LBPRC), lo que es una cifra significativa.

Se desconoce cuál había sido previamente la mayor cantidad de peloteros cubanos activos en una temporada de la LBPRC, pero una consulta a varios sectores de la liga creó un consenso de que 14 es una cifra récord.

El bateador cubano de los Cangrejeros de Santurce, Rusney Castillo, fue uno de los consultados por ser uno de los principales cubanos en la liga por su calidad competitiva y años de participación. Castillo jugó al menos cinco temporadas con los Criollos de Caguas antes de llegar a Santurce para esta temporada.

“Lo más que había visto antes eran 4-5 peloteros. Ahora puedo contar nueve malcontados”, dijo.

Hay varias razones para que fueran 14 los cubanos activos en el torneo, comenzando por una básica: el aumento de equipos, como Ponce, que reclutó a cinco cubanos para su temporada de regreso, informó el gerente general y dirigente de los Leones, Edwin Rodríguez.

Entre los cubanos de Ponce estuvieron los jugadores de posición Dairon Blanco y J.C. Escarra y el lanzador Pedro Echemendía, quienes tuvieron una buena participación y ayudaron a que Ponce estuviera con vida hasta el último día de la competencia.

El equipo RA12, que es el proyecto de desarrollo de Roberto Alomar, debutó además este año en el reclutamiento de jugadores importados al contratar a los cubanos Eduardo León y Jorge González.

Hay también una razón político-deportiva, así como una civil, para que los cubano aumentaran su participación en la LBPRC, en la que juegan como importados dentro del marco de 10 extranjeros que puede contratar cada novena.

La razón política es la ‘veda’ levantada por MLB a la liga de Venezuela para que jugadores afiliados a MLB fueran a jugar a ese país, dijo Castillo. El regreso de jugadores afiliados a Venezuela limitaron los espacios allí a los jugadores cubanos.

“En Venezuela los rosters estaban llenos. Por cierto, yo a donde iba a jugar era en Venezuela. Cuando MLB quitó eso (restricciones), ellos me llamaron que estaban llenos y así decidí venir para acá. Han venido muchos cubanos por eso”, dijo.

Castillo agregó que Venezuela, República Dominicana y México son los principales mercados de los peloteros cubanos porque, sin restarle méritos a Puerto Rico, la calidad del juego es buena también y la paga en esos países es mejor que la de Puerto Rico.

La razón civil es el estatus de los cubanos, particularmente los que están en el proceso de conseguir visados o ciudadanías estadounidenses, informó el asistente gerente general de los Cangrejeros, Kevin Colón.

Un pelotero cubano en medio de este proceso no puede estar fuera de suelo estadounidense. Sí puede estar en territorios, como Puerto Rico. Esa es una ventaja que tiene la LBPRC sobre otras ligas del Caribe, que no son jurisdicción política de Estados Unidos.

“Es beneficioso para nosotros tener ese tipo de pelotero. Y algo que nos beneficia es que el cubano que está trabajando en su visado no puede ir para Dominicana o Venezuela. Tenemos que seguir con esa tendencia porque es un país con muy buenos peloteros hechos o que vienen por ahí“, abogó Colón.

Además de Castillo, a quien Colón describió por un activo para el equipo, los Cangrejeros también tuvieron a Pedro León “que es un pelotero con potencial de llegar a las Grandes Ligas y ser de impacto”. Norel González fue otro cubano con Santurce este año.

Desde Alejandro Oms (Guayama 1938-39), Rafael Echevarría (Caguas 1938-39), a Silvio García (Ponce 1939-40), entre varios otros mencionados por el historiador Jorge Colón Delgado, a peloteros posteriores a la revolución cubana como Mike Cuellar, Tany Pérez, Luis Tiant y Octavio ‘Cookie’ Rojas, muchos peloteros cubanos han pasado y han sido de impacto para la LBPRC. Algunos de ellos incluso hicieron residencia en Puerto Rico.

El gerente general de los Indios de Mayagüez y escucha de los Reds de Cincinnati, Héctor Otero, recuerda, inclusive, haber importado a cinco cubanos para la temporada el 1999-00 con Santurce.

Los cubanos actuales en Estados Unidos también se están abriendo otras puertas importantes: participar con Cuba en el Clásico Mundial 2023.

Cuba abrió su roster del Clásico a peloteros cubanos en Estados Unidos, al igual que ha hecho con otros deportes, particularmente los federativos. Cuba fue subcampeón en el 2006, pero desde entonces no ha subido al podio o finalizado entre los mejores cuatro.

Castillo dijo que no estará en el Clásico porque no lo llamaron, pero dijo que se alegra por el país y por los colegas peloteros que tendrán la oportunidad de devolver a Cuba al podio que se merecen.

“Cuba comenzó en eso con el voleibol y creo que con el baloncesto también. Este año en el beisbol se abrió el tema del Clásico y llamaron a 12 peloteros, de los cuales cuatro están en Grandes Ligas. Escuché en una página web cubana que MLB les exigió que tenían que llevar gente de aquí. Contento estoy porque quiero que Cuba tenga esa presencia de que ganábamos eventos, que tengamos un equipo competitivo”, dijo Castillo.

Yoan Moncada y Luis Roberts, ambos de los White Sox de Chicago, están entre los peloteros de Grandes Ligas que jugarán con Cuba en el Clásico.