Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 14 años.
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Las páginas del libro sobre la vida de cada ser humano están llenas de experiencias que llegan tras superar con creces retos y pruebas inimaginables.
Para el ex grandesligas Juan Padilla este año será inolvidable, pues ha tenido que reponerse de golpes imprevistos.
El lanzador jugó para los Tarzanes de Mayagüez en el béisbol Doble A hasta que a finales de marzo tuvo que ser recluido en la Unidad de Cuidado Intensivo del Hospital Bella Vista de Mayagüez tras sufrir complicaciones después de una operación del apéndice.
En aquel momento, los médicos lo sometieron a una segunda operación en la que le limpiaron toda la infección y los dos abscesos que se crearon en el área. También parte de su intestino se vio afectado y un pedazo le fue cortado.
“Le doy gracias a Dios por dejarme estar un tiempito más en la Tierra para seguir haciendo mis cosas y disfrutar de mi familia”, dijo el jugador, según comunicado de prensa enviado por la Federación de Béisbol.
“En dos de los días que estuve hospitalizado llegué a estar más allá que acá”, explicó Padilla, que jugó para los Yanquis de Nueva York, los Rojos de Cincinnati y los Mets entre el 2004 y el 2005.
Luego de recuperarse, Padilla retomó su rutina de vida lo más rápido posible.
El pasado 21 de abril, el derecho fue contratado como coach por los Pittsfield Colonials en la CanAm League (Liga Independiente), pero no pasó mucho tiempo cuando ya estaba de regreso a la loma hacer lo que mejor sabe: lanzar.
“Desde que me dieron el visto bueno para seguir jugando, comencé a trabajar y a ponerme ready”, explicó Padilla.
Y así fue. El derecho, de 33 años de edad, comenzó a dejar su huella al punto de convertirse en el segundo lanzador con más juegos salvados de la liga tras agenciarse 17 salvamentos. También culminó la temporada regular con dos victorias y una efectividad de 2.86.
Además, consiguió la única victoria de su equipo en la serie final de la CanAm League tras una excelente aparición en la novena entrada del primer partido ante los Quebec Capitals.
La nueva meta de Padilla en estos momentos es ayudar a Puerto Rico a clasificarse a la Copa Mundial de Béisbol.
Para ello está dispuesto a asumir cualquier rol dentro de la Selección Nacional en el Premundial de Béisbol que dará inicio el 1 de octubre en Ponce, Mayagüez y Carolina.
“Yo le dije a Eduardo (Pérez, dirigente) desde que me llamó, que me puede usar en el rol que me necesitara”, sostuvo Padilla.
“ Si me necesitaba como abridor, podría abrir porque estoy ready, sólo me tengo que extender más innings. Si es relevando, es lo que he hecho todo el año. Me siento bien y de cualquier forma que me necesiten ahí estaré”, concluyó.