José Rafael Dávila Román: El abogado del pueblo
A pesar de no contar con el título oficial, el pueblo de Vega Baja apoya y es cómplice de la fantasía del fanático número uno de los Caimanes del Melao Melao.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 9 años.
PUBLICIDAD
Vega Baja. Los Caimanes del Melao Melao y todos los vegabajeños tienen a su propio licenciado, una de las personas más queridas por los habitantes del pueblo del área norte de la Isla.
José Rafael Dávila Román se levanta todas las mañanas, selecciona uno de los trajes que tiene en su clóset, desayuna y sale de su hogar en la urbanización Colinas del Marqués en dirección al tribunal de Primera Instancia de Vega Baja.
“Voy al tribunal todos los días porque trabajo para un bufete de abogados en el área de Vega Baja. Ellos envían documentos, si no es conmigo no pueden enviar el documento porque si no no lo aceptan de otra persona”, explicó Dávila Román.
En el tribunal es atendido por todo el personal, jueces y fiscales de la misma forma con que reciben a los abogados que litigan en esa área.
“Es uno de los personajes más típicos que tiene Vega Baja. Es un personaje sumamente pintoresco, un muchacho excelente, con poca preparación, un corazón enorme y la enorme fantasía de ser abogado con la gran pecularidad de que todo el mundo en Vega Baja, todo el mundo, habla con él sobre esa fantasía. Nosotros lo sentimos como si fuera el licenciado Joe”, dijo el vegabajeño Luis Enrique Meléndez, otro de los fanáticos que no se pierde ni un partido de béisbol.
A sus 47 años, Dávila Román puede también considerarse uno de los fanáticos más fieles de los Caimanes del Melao Melao, una de las primeras franquicias creadas en la Liga de Béisbol Superior Doble A.
Dávila Román asiste a todos los partidos bien temprano para hablar con los peloteros, quienes siempre lo han considerado una pieza más dentro del equipo por la motivación que les imparte.
“Puedo decir muchas cosas buenas de él. Cada vez que viene por ahí nos trae mucha alegría y le tomas mucho cariño cuando lo conoces, con tan solo hablar cinco minutos con él. Es una muy buena persona, excelente ser humano. Aquí en Vega Baja todos lo adoramos”, aseguró Jesús Lay, jugador del cuadro de la novena de Vega Baja.
Su compañero Carlos Olivo fue más allá y lo nombro como “el fanático número uno” del equipo.
“Él es el licenciado de todos nosotros. De eso no debe quedar ninguna duda. Cada año dice presente en las buenas y en las malas. Está con nosotros mostrándonos apoyo en las victorias y las derrotas. Es el fanático número uno de todos nosotros”, sostuvo el veterano jardinero.
“Él único problema que tenemos es hay veces que me lo encuentro y me dice que tiene que ver un caso en Ponce y otro acá el mismo día. Entonces, me preocupo y le pregunto: ¿cómo vas a hacer para llegar a tiempo acá?”, manifestó por otro lado el coach de Vega Baja y ex miembro de la Selección de Béisbol de Puerto Rico, Josué Salvá, mostrando la complicidad que todos tienen con Dávila Román.
Esta temporada, Vega Baja busca acabar con la sequía de cuatro años sin clasificar a una postemporada.
El pasado viernes, los Caimanes del Melao Melao inauguraron su temporada y en el estadio Carlos Román Brull se encontraba “el licenciado Joe” -apodo por el que todos los conocen- vestido con un traje gris con líneas finas blancas, un pañuelo blanco y una corbata que le hacía juego desde las 5:45 p.m.
Luego de detenerse a saludar con su mano a todo el personal que se encontraba en el portón del recinto vegabajeño, Dávila Román se dirigió al terreno de juego por el pasillo que va al camerino de visitante, que queda a la izquierda de la cantina.
Tan pronto cruzó el umbral de una de las entradas al dugout de los Caimanes del Melao Melao, comenzaron los abrazos, los apretones de mano y las conversaciones con los jugadores del equipo.
Uno de los primeros en abrazarlo lo fue el ex jugador de las Mayores, Juan “Igor” González, quien este año comienza una nueva faceta como dirigente.
Dos horas más tarde, a Dávila Román le tocó vivir un emotivo momento en su vida. La gerencia de los Caimanes del Melao Melao decidió rendirle un reconocimiento por todo los años que ha apoyado al equipo. Tan pronto fue mencionado su nombre por el apoderado Edwin Meléndez Pagán, los cientos de fanáticos comenzaron a aplaudir y vitorear.
“Soy nacido y criado en Vega Baja y al dirigente del equipo yo lo conozco desde hace años ya que porque conozco a sus señores padres. Me siento más que debidamente orgulloso de que me dediquen la temporada en la noche de hoy”, sostuvo Dávila Román al mencionar el reconocimiento.