La ocasión más reciente que José de León se enfrentó a los Indios de Mayagüez antes del jueves, el isabelino salió del Isidoro ‘Cholo’ García con una derrota y con cinco carreras limpias, incluyendo tres jonrones, adjudicadas a su cuenta. Eso fue el 27 de diciembre.

Pero el orgullo y la competitividad es tanta en el lanzador derecho que no pudo dejarlo a un lado, y cuando volvió a enfrentarse a los mayagüezanos el jueves, básicamente los anuló al permitirle solo dos hits, darles un boleto, y abanicarlos en 12 ocasiones en el triunfo de 4-0 de sus Criollos en el inicio de la serie final de la Lbprc.

“Definitivamente el fuego era distinto”, dijo De León tras finalizar tal vez su apertura más dominante de este año en la pelota invernal boricua. “Somos muy competitivos y en mi última salida ellos me castigaron. Había una espinita ahí. Pero todo con mucho respeto”.

“Estaba pitcheando a base de mi recta y vi que estaban teniendo problema con la recta arriba, y la seguí usando. Si me hubiese dado cuenta de que hacían ajustes con ese pitcheo pues hubiese empezado a usar los pitcheos rompientes, que fue lo que hice en la sexta entrada”, agregó.

Y tras los seis episodios de trabajo fuerte, De León ponchó al menos una vez a cada integrante del lineup de los Indios.

“Me sentí bien duro. Creo que es lo más duro que he tirado en Puerto Rico este año. Me dijeron que estaba entre 96 y 97 mph”, contó. “Hoy (jueves) me sentía super bien, y lo mejor es que fue después de tantos días sin lanzarle a otro equipo. No es fácil tener inactividad y venir a hacer el trabajo.

Como integrante del roster de 40 de los Reds de Cincinnati, De León espera que el impulso que ha tomado en la actual campaña invernal se traduzca en una buena actuación en los campos primaverales, a los cuales está invitado.

De León, quien perdió toda la campaña del 2018 tras sufrir una ‘Tommy John’, ha ido poco a poco tratando de recuperar la promesa que hizo que los Dodgers de Los Angeles lo draftearan en el 2013. Durante el 2019, con los Rays de Tampa Bay, pudo concretar su regreso a una lomita tras la operación, pero pasó casi todo el año en las menores.

En el 2020 pasó a los Rojos de Cincinnati, con los que lanzó solo seis entradas y tuvo efectividad de 18.00 en cinco partidos de la irregular temporada.

Por ello se reportó temprano a los Criollos y trabajó duro desde el primer día de entrenamientos.

“No quiero decir que ese mismo José de León es el que va a estar en spring training, pero sí el José de León que se ha levantado temprano todos los días a entrenar y que se ha fajado por estar en una condición física de primera. Cuando uno trabaja va a tener frutos y unos se los disfruta más”, finalizó.