Jonathan Morales la monta en los pasillos del loanDepot Park y después se luce en la receptoría
Cuando Puerto Rico llega a los juegos de la Serie del Caribe, se apodera de los pasillos del estadio en Miami con un radio que carga el receptor de los Criollos.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 6 meses.
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Miami. Cada vez que los Criollos de Puerto Rico llegan al loanDepot Park, en Miami, Florida, se dejan sentir desde que están en los pasillos del estadio.
Los primeros que entran al parque son Yadier Molina y su cuerpo técnico. Molina es seguido por sus jugadores, quienes mientras comienzan a acceder a la instalación, lo que se escucha es sazón, batería y reguetón, como diría Tego Calderón.
La música proviene de un colorido radio que carga el cátcher Jonathan Morales siempre que los Criollos hacen su entrada por los pasillos del estadio de los Marlins. Considerado por muchos como el alma del equipo, Morales se ha convertido también en el DJ de la novena boricua previo a cada encuentro en el torneo regional.
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“Yo siempre he estado activo con la música. Me gusta la música y siempre traigo la bocina para activar a todo el mundo. Siempre la pongo. En Caguas, no la llevaba porque ya había una grande allí“, contó el receptor de los Criollos a Primera Hora.
“Ese soy yo. Yo soy así siempre. Le transmito buena energía a la gente por eso. Siempre me gusta estar así activo y por eso a lo mejor interactúan conmigo y se contagian con mi energía”, abundó.
Dicen que el boricua la monta donde sea y, en este caso, ha sido Morales quien se ha encargado de montar la fiesta en la Serie del Caribe. Pero, a pesar de que fuera del terreno es un vacilón con sus compañeros, no bromea a la hora que se pone la careta y el peto detrás del plato. El receptor arroyano fue la pasada temporada de la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente (LBPRC), si no el mejor, uno de los más destacados en su posición.
Su habilidad en la receptoría la ha exhibido en el certamen al fusilar a múltiples corredores cuando intentan llegar al plato.
“(Estoy) tratando de coger la bola con los buenos tiros que están tirando desde los fields. Vamos a seguir trabajando y metiendo el corazón en cada jugada”, dijo.
Ese talento y esfuerzo detrás del plato hizo que se ganara la confianza de uno de los mejores cátchers que ha salido de la isla, Yadier Molina. El piloto de los Criollos también funge como asistente especial del presidente de operaciones de béisbol de los Cardinals de San Luis, John Mozeliak, y le recomendó la firma de Morales para un contrato de liga menor.
“Uno va a trabajar duro todos los días para tratar de obtener victorias y, a lo mejor, Yadier se ve en mí. Él también fue catcher y por eso hemos conectado bien”, comentó.
A mediados de enero, el cátcher, de 29 años, le relató a este medio cómo Yadier y Cheo Molina habían influenciado en su juego en el poco tiempo que llevaban juntos. Morales solo pudo disputar ocho partidos de la temporada regular de la LBPRC debido a una hernia deportiva, cuando arribó a Puerto Rico después de competir en la Triple A con los Isotopes de Albuquerque, equipo filial de los Rockies de Colorado. Pero, ocho partidos y la postemporada fueron suficientes para dejarle una buena impresión a Yadier.
Morales, que ha jugado ocho campañas en la pelota invernal, fue instrumental en la conquista del vigesimoprimer campeonato de Caguas. Ahora busca volver a ganar la Serie del Caribe en su sexta participación en la justa deportiva frente a la mayor cantidad de personas que ha podido jugar en su carrera.
“Ha sido superbrutal (esta experiencia). Es la primera vez que juego en un estadio de Grandes Ligas al frente de mucha gente... Es una competencia fuerte. Está todo el mundo luchando por el trofeo y su patria. Está todo el mundo jugando con el corazón”, indicó.
Morales y los Criollos no verán acción el martes, pero volverán a los pasillos y terreno del loanDepot Park el miércoles para el partido contra Curazao, a las 11:30 a.m. (hora de P.R.).