Guayama. La presencia de uno de sus hijos predilectos en la Serie Mundial fue la excusa perfecta para que la Plaza Pública Cristobal Colón fuera el punto de encuentro para vitorear a Eddie Rosario y a los Braves de Atlanta.

Un cielo despejado, acompañado por una tenue brisa que mantuvo la noche fresca, invitaron a los compueblanos de Rosario para que poco a poco se acercaran para ocupar uno de los bancos de madera ubicados a poca distancia de una pantalla gigante colocada frente a la Casa Alcaldía para el tercer partido del Clásico de Otoño desde Atlanta.

No era la primera vez. La misma escena ocurrió para los primeros dos encuentros. Aunque hubo una merma en la cantidad de personas, aun así se percibía entusiasmo por las ejecutorias de Rosario.

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“Fue un incentivo de la administración municipal para que la gente tenga la oportunidad de ver la Serie Mundial y el desempeño de nuestros Eddie”, compartió Ismael Ortiz, quien fue testigo del crecimiento de Rosario en las Pequeñas Ligas Radamés López.

Fanáticos ven la Serie Mundial en la Plaza de Guayama.
Fanáticos ven la Serie Mundial en la Plaza de Guayama. (Alejandro Granadillo)

Rosario ha sido el tema de conversación en Guayama desde que destrozó a los lanzadores de los Dodgers de Los Ángeles durante la Serie de Campeonato de la Liga Nacional para cargar con el premio de Jugador Más Valioso (MVP).

“Todos estamos emocionados y contentos por el desarrollo que ha tenido. “Eddie ha puesto a Guayama en el mapa, tanto así que cuando le dieron el trofeo de MVP, lo primero que dijo fue Guayama”, sostuvo Ortiz.

Francisco Cintrón Figueroa es otro que conoce bien la historia de Rosario y el camino que el pelotero ha recorrido hasta convertirse en un protagonista de la Serie Mundial.

“Una vez dio el paso a ser el MVP ante de llegar a la final, eliminando a un equipo como los Dodgers, el pueblo, los amigos y la prensa comenzaron a darle más cobertura y pudieron identificar a nuestro pueblo de Guayama. Puedo dar fe que muchos sectores de Guayama están viendo”, dijo Cintrón Figueroa.

“El sentir de la gente está claro porque Eddie es humilde, un muchacho que jugó todas las categorías menores en Guayama. Cuando viene, comparte con la gente y sigue siendo el mismo”, agregó.

El camino de Rosario hasta la Serie Mundial fue poco convencional. Los Twins de Minnesota optaron por dejarlo libre en lugar de pasar por el proceso de arbitraje. Luego firmó un contrato de un año con los Indians de Cleveland. Fue canjeado a los Braves a pesar de una lesión en el costado que lo mantuvo fuera por un considerable tiempo.

“Eddie ha pasado por situaciones difíciles desde joven que las pudo superar. Guayama reconoce eso sabiendo que es una persona humilde y lo aprecian un poco más”, relató Cintrón Figueroa.