Grupo de profesores en Las Vegas busca impedir que impuestos financien parque de Atléticos
Han interpuesto una demanda destacando que cada uno de los $380 millones de fondos públicos aprobados para esa construcción son fondos que se deben usar en la educación.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 6 meses.
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Las Vegas. Un grupo de profesores de Nevada interpuso una demanda para impedir que el gobierno del estado destine dinero de los contribuyentes para edificar un estadio de béisbol en la calle principal de Las Vegas, adonde se mudarán los Athletics de Oakland.
Strong Public Schools Nevada, un comité de acción política, apoyado por la Asociación Educativa del estado, presentó una demanda el lunes ante una corte en Carson City. Impugnó así la asignación de hasta 380 millones de dólares en fondos públicos aprobados en junio por la Legislatura estatal dominada por los demócratas y por el gobernador republicano.
“Cada dólar que gastamos para construir estadios es un dólar que no estamos usando para la educación pública”, recalcó la asociación en un comunicado que emitió el martes su portavoz Alexander Marks. “El dinero público no debería ir a un multimillonario para un estadio en momentos en que Nevada ocupa el 48vo sitio de la nación con los grupos más numerosos en las aulas y con los mayores índices de vacantes de educadores en el país”.
El estadio de 1,500 millones de dólares, 30,000 asientos y techo retráctil se construiría en el lugar que ocupa ahora el hotel Tropicana. Está próximo al estadio de los Raiders de Las Vegas, el equipo de la NFL que se mudó en 2020, también desde Oakland.
También cerca está la casa de los Golden Knights del hockey sobre hielo, quienes ganaron la Copa Stanley la temporada anterior, apenas en su sexto año de existencia.
La pelea por los fondos públicos llega en medio del debate en otras ciudades y estados sobre los costos y beneficios del apoyo brindado por los contribuyentes a las sedes deportivas. En 2016, los legisladores del estado de Nevada otorgaron 750 millones de dólares en ayuda pública al Allegiant Stadium, el recinto de los Raiders, que tuvo un costo cercano a los 2,000 millones.
La T-Mobile Arena, casa de los Golden Knights, se inauguró sin asistencia pública.
Carolyn Goodman, alcaldesa de Las Vegas que perdió en su intento de que el estadio de béisbol se ubicara dentro de los límites de la ciudad, dijo en un podcast el lunes que una mudanza de los Atléticos “no tenía sentido”. El hotel Tropicana está fuera de los límites de la ciudad pero dentro del condado de Clark.
“Personalmente, pienso que ellos deben encontrar la manera de quedarse en Oakland para hacer que sus sueños se conviertan en realidad”, indicó.